Desnaturalizar. Este es uno de los principales objetivos de Mujeres Que No Fueron Tapa con su proyecto “Festival de Hackeo de Revistas en las Escuelas”. Se trata de una propuesta para docentes y el alumnado de “hackear” el discurso hegemónico de los medios masivos a través de collages empleando la perspectiva de género y la reflexión, a la que ya se inscribieron casi 200 docentes de casi todo el país.
La inscripción a esta actividad gratuita se encuentra abierta y el objetivo es deconstruir los cánones de belleza impuestos por los medios, los estereotipos, mostrar a las “mujeres que hacen” saliendo de los límites de “la mujer objeto” y entender que la diversidad existe. Sin embargo, los medios de comunicación hegemónicos tienden a convertir en monótonos sus mensajes unificando estándares que influyen y afectan la construcción de identidad de género de lxs chicxs y que en la adolescencia se traducen en bullying, en trastornos en la alimentación y malestar.
Por eso, Noticias Urbanas dialogó con Lala Pasquinelli, fundadora de esta entidad, artista visual, poeta y abogada, para que cuente en primera persona cómo su iniciativa logra paliar algunas deficiencias de la educación escolar, por ejemplo, en términos de la Educación Sexual Integral, que fue sancionada y promulgada hace más de 12 años (en 2006) pero que aun no tiene incidencia en las escuelas. “Los estereotipos de género encuadran en uno de los objetivos esenciales de la ESI, que es la igualdad de trato y oportunidades para varones y mujeres. Los roles y estereotipos de género atentan contra esa igualdad que se promueve desde la ESI”, explica Pasquinelli sobre cómo aporta su iniciativa sobre la educación integral de lxs chicxs.
Cómo participar
Las escuelas interesadas pueden inscribirse en su página web o bien capacitar a los y las docentes u obtener ayuda para la organización del festival se encuentra a disposición su correo de email mujeresquenofuerontapa@gmail.com. Acto seguido, MQNFT enviará material e instrucciones detalladas; una vez realizadas se envían de vuelta a la organización y se comparte incluso en redes sociales.
“Generar reflexión y expresión es indispensable para aliviar las tensiones y opresiones de esta sociedad de consumo en la que vivimos en los ámbitos donde lxs chicxs están juntxs y poder registrar que eso que les pasa a ellxs no es un problema de cada unx con su cuerpos o con sus elecciones, sino que es parte de una cultura que nos impone formatos de cuerpo y subjetividades es muy aliviador para lxs chicos“, explica la especialista feminista.
¿Te gustaría hacer un Hackeo de Revistas en tu escuela?
Te invitamos a participar de este Festival colaborativo!Si sos docente, alumno, madre o padre de un alumno y te gustaría que esta experiencia llegue a tu escuela, entre a este link https://t.co/zOFDYpqxwd pic.twitter.com/tgrkT5Wptm
— Mujeresnofuerontapa (@mujeresquenofu1) May 14, 2018
Hackeo de conciencia
El nombre del festival mantiene inscripto parte del objetivo de dicha actividad. “Se llama Hackeo de Revistas porque en Mujeres Que No Fueron Tapa esta idea es central. Tomamos como referencia la ética y manifiesto hacker y usamos esa información masiva y homogénea para construir otros mensajes”.
“En el proceso del hackeo de revistas esto es central en la primera parte de la actividad porque las revistas que son lo cultural masivo, estereotipante, homogéneo, son usadas por lxs participantes para la expresión singular y sensible, cada unx responde una pregunta a través de un collage que hace con pedacitos de esas revistas. Usamos esas revistas para hablar de nosotrxs, de nuestra diversidad y humanidad. Ese es el gesto de hackear“, completó al hacer referencia a la intención de “hackear” la conciencia de lxs chicxs, bombareada por mensajes hegemónicos.
Asimismo, Pasquinelli contó sobre los buenos resultados que vienen consiguiendo desde hace más de dos años “hackeando revistas” en diferentes contextos y territorios, ya que las personas participantes lograron cambiar su mirada.
Se trata igualmente de un trabajo mancomunado donde “participaron un montón de mujeres geniales”, además de MQNFT, que aportaron una gran ayuda: “Hubo docentes que me ayudaron mucho, como Virginia Surur, Ethel Parietti de Angelini, Nadia Fink de Antiprincesas que aportó en el armado de una versión del hackeo que es diferente a la del Festival y está en el libro de Insfancias Libres. También hicieron lo suyo Florencia Fernández Frank y Gabriela Mesutti que son artistas; Melina Masnatta de Chicas en Tecnología, que fue la que sembró la semilla de esta idea; Anna Torres de Wikimedia nos ayudó con las bases y muchas otras personas fueron agregando su mirada y su opinión”.
De esta forma, en paralelo a la lucha por la implementación de la ESI, esta actividad aporta a la educación sexual en la temprana edad.