Cristina Fernández de Kirchner retomó los actos el mismo día en que comenzó la campaña electoral para las elecciones generales de octubre. Hubo dos novedades importantes con respecto a la campaña de las PASO: tratar de seducir al voto del peronismo duro, para lo cual eligió presentarse en Florencio Varela, y hacer un llamado para unir a la oposición.
En la tarde del último domingo, la candidata a senadora nacional por Unidad Ciudadana en la provincia de Buenos Aires encabezó un acto en el parque municipal de la localidad del sur del conurbano bonaerense, donde UC tuvo una buena performance, con el 49% de los votos en las PASO.
En primer lugar habló el compañero de fórmula de Cristina, Jorge Taiana, quien llamó a “que el pueblo vote en defensa propia”.
Luego fue el turno de Cristina, que apareció sobre el escenario vestida de blanco. Sus primeras palabras fueron dedicadas al aniversario de la Noche de los Lápices, y, en ese marco, apoyó las tomas en las escuelas contra la reforma educativa que promueve el Gobierno porteño: “Los jóvenes están discutiendo la reforma educativa, su derecho a decidir qué colegio quieren, qué van a hacer cuando lleguen a 5to. No quieren ser condenados a la flexibilización y el trabajo barato, me conmueve realmente”, sostuvo.
Detrás de ella estaban los intendentes kirchneristas y los candidatos de su espacio. Acto seguido, Cristina empezó a referirse a las elecciones: “Dentro de 35 días, el 22 de octubre, se define si el tercer senador de la provincia va a ser Jorge Taiana o Gladys González”, dijo. Elogió a Taiana (mencionó “su historia, su compromiso, su sufrimiento”) y sostuvo: “Nosotros militamos, comprendemos, porque tenemos convicciones profundas. No es soberbia ni arrogancia, es el resultado del 13 de agosto, que posicionó a unos y a otros, dándonos la razón en algo”.
Cristina hizo un nuevo guiño a la oposición, luego del llamado hace días, a través de una carta abierta, a que los votantes dejen de lado, por ejemplo, el massismo o el randazzismo y elijan la boleta de Unidad Ciudadana en octubre: “Más que discutir entre los que pensamos igual o podemos tener algunas diferencias, lo más importante en este momento, compatriotas, es construir lo que la sociedad está demandando. Una oposición seria, firme y concreta frente a un modelo que desde [el acto de lanzamiento de su campaña para las PASO en] Arsenal hasta aquí ha agravado las cosas”.
“Por eso escribí la carta abierta que era para la oposición de Buenos Aires. Esa carta disparó discusiones y disparó reflexiones de dirigentes que por ahí no están en nuestro espacio, dirigentes compañeros de sindicatos, que han tenido una visión crítica, pero les agradezco la reflexión frente al severo y serio momento que atraviesa la Argentina.”
Luego se dirigió al presidente del PJ, José Luis Gioja, quien pidió votar por Cristina: “Quiero agradecerle al presidente del PJ su carta abierta a los peronistas”, destacó. No se refirió, en cambio, a las distintas expresiones de referentes opositores, como Sergio Massa y Florencio Randazzo, que salieron a rechazar públicamente el pedido de unidad bajo el ala del kirchnerismo.
Cristina insistió: “Sabemos que es una elección parlamentaria, sabemos que quien gobierna tiene que hacerlo hasta 2019, queremos que lo hagan mejor, que cambien el rumbo. Porque la grieta que tanto preocupa a algunos en lo social, económico y de derechos que se está produciendo, es allí donde debemos estar y dialogar en público sin prejuicio, porque no se puede seguir estigmatizando al que piensa diferente. No se puede considerar enemigo a quien cree que los trabajadores tienen que tener sus derechos”.
En varios pasajes, Cristina volvió a referirse al “gran ajuste” que planea el Gobierno después de las elecciones: “Si hasta ahora tuvimos una primera fase del ajuste, se viene después de las elecciones el gran ajuste. Lo saben todos y todas”.
Durante algunos minutos abundó sobre “los aumentos, la precarización laboral, los despidos, el cierre de fábricas e industrias”, entre otros y se refirió a la deuda, a las políticas por Malvinas, entre otras críticas al gobierno de Mauricio Macri.
La exmandataria destinó un pasaje de su discurso al caso de la desaparición del joven Santiago Maldonado donde pidió al Presidente, aunque sin nombrarlo, que se refiera al tema: “Tenemos que volver a preguntar dónde está un ciudadano que no aparece. Les voy a decir lo que pienso, sería bueno que ante un hecho tan conmocionante escuchemos su voz sobre un hecho que conmociona y conmueve a la sociedad, eso es ser republicano y democrático”.