Luego de haber anunciado la creación de la Secretaría de Hábitat, que tendrá la misión inicial de urbanizar cien villas, y responderle al juez neoyorquino Thomas Griesa, tras conocerse su decisión de declarar al país en “desacato”, a raíz del conflicto que la Argentina mantiene con los fondos buitre, la presidenta Cristina Kirchner se refirió este martes a las supuestas amenazas que recibió del grupo terrorista islámico ISIS y alertó que “si me pasa algo, que nadie mire hacia el oriente, miren hacia el norte”.
Además, calificó como una “inmensa provocación” la decisión de la Embajada de los Estados Unidos en Buenos Aires de advertir sobre la inseguridad a los ciudadanos estadounidenses que viajen a la Argentina.
Por otra parte, Cristina criticó las declaraciones de un vocero del Departamento de Estado estadounidense, quien afirmó que ese país “sigue de cerca” el conflicto los holdouts, y advirtió: “No sabemos cómo hacen ese monitoreo de cerca”.
La mandataria denunció que existen “sectores concentrados de la economía que quieren voltear al gobierno y quieren hacerlo con ayuda internacional”. “Si me pasa algo que nadie mire hacia oriente, miren hacia el norte”, alertó la Jefa de Estado luego de hacer referencia a las supuestas amenazas que recibió del grupo terrorista islámico ISIS y que ella misma reveló en su mensaje ante la Asamblea General de Naciones Unidas.
Al respecto, rechazó: “Después de ver las cosas que se están haciendo desde determinadas representaciones diplomáticas, después de escuchar declaraciones que parecen un ejercicio de cinismo, que vengan a crearnos una historieta de que el ISIS me está buscando para matarme”. En Casa de Gobierno, exigió que “no vuelvan a armar ninguna novela, como armaron con otras cuestiones”, que prefirió no precisar.
La Presidenta también cuestionó la nota de la Embajada estadounidense para que los ciudadanos de ese país que viajen a la Argentina tomen recaudos ante la inseguridad.
“Esto es una provocación, una inmensa provocación en la cual no voy a caer. Al señor que redactó esto, que ya sabemos que es el que anunció el default, no lo vamos a echar del país porque no acostumbramos echar a nadie”, remarcó. Y apuntó, sin nombrarlo, contra el embajador interino Kevin Sullivan.
La primera mandataria agregó: “Ya sabemos quién es, no lo vamos a echar del país porque capaz que después tenemos un problema doble, si ya lo conocés hay que dejarlos”.
“Por lo menos lo tenemos identificado”, destacó la Presidenta en alusión a Sullivan, quien semanas atrás fue citado por el canciller Héctor Timerman por afirmar que para Estados Unidos “es importante que el país salga del default”.
CRÍTICAS PARA LOS PRESIDENCIABLES Y EL SINDICALISMO
Por otra parte, la Presidenta se hizo espacio para criticar a los aspirantes presidenciales de la oposición que “prometen sacar el Impuesto a las Ganancias y las retenciones” y advirtió que si se realizan esas reformas “a lo mejor no alcanza el sueldo para pagar el Impuesto a las Ganancias”.
“Prometen de todo y ya sabemos lo que pasa”, expresó la mandataria en un discurso en la Casa Rosada en referencia a las propuestas de campaña de dirigentes de la oposición como el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri y el diputado por el Frente Renovador, Sergio Massa, ambos con intenciones de sucederla en 2015.
La jefa del Estado ironizó que “te prometen que no va a haber retenciones, impuesto a las ganancias, pero es posible que -en caso de que estos dirigentes accedan a la presidencia- a lo mejor no alcance el sueldo para pagar impuestos a las ganancias”.
En este sentido, la Presidenta solicitó estar “muy atentos” y reconoció que “es la primera vez en décadas que tenemos algunos problemas pero ojalá los problemas sean estos y no los que afrontamos en 2001 o 2003”.
Por otro lado, cuestionó también a dirigentes sindicales y advirtió que “es cierto que los sindicatos son de Perón, aunque algunos parece que son de los fondos buitres”, sin brindar precisiones sobre sus destinatarios.