Daniel Scioli tuvo un nuevo gesto de acercamiento hacia el massismo. Luego del quiebre en la relación personal con Sergio Massa que significó su actitud de relativizar el robo a la casa del ex intendente de Tigre, perpetrado por el prefecto Acídes Díaz Gorgonio en el año 2013, quien fue condenado en marzo de este año a 18 años de prisión, el candidato presidencial por el FPV le pidió disculpas.
En declaraciones a Radio Uno, Scioli expresó: “No tengo ningún problema en hablar con él y transmitirle a su familia que si en algún momento interpretaron lo que interpretaron, obviamente me disculpo con él y su familia, Malena y los hijos”.
“Entiendo el dolor y la situación tan desagradable que pasaron, pero si hay algo que yo he hecho siempre es que si tengo semejante responsabilidad política, va a ser fruto de mi trabajo, jamás deseando que al otro le vaya mal o haciendo algo malintencionado”, agregó el gobernador bonaerense.
En ese contexto, Scioli sembró dudas sobre el hecho al considerar que “pudo haber ocurrido una entregada para que el prefecto entrara a la casa cuando no había nadie”.
La familia de Massa nunca perdonó esas expresiones de Scioli, que incluso fue insultado por Malena Galmarini (esposa del ex candidato presidencial UNA) en un cruce fortuito que se produjo en un canal de televisión. “Con vos todo mal, pedazo de forro”, le dijo la concejala electa de Tigre en aquella ocasión.
Las malas lenguas sostienen que los dichos del postulante presidencial K responden a supuestas exigencias que Massa le habría hecho, a cuenta de un posible acuerdo político, que incluiría al ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, y al gobernador cordobés José Manuel De la Sota, los massistas más reticentes a apoyar a Mauricio Macri en el balotaje.
Asimismo, al retomar su campaña rumbo a la segunda vuelta el jueves pasado, Scioli también se comprometió a tomar una de las principales banderas de Massa: la implementación del 82% móvil para los jubilados.