Francisco De Narváez ya no mira de lejos la crisis interna en el massismo bonaerense. Más allá de su preocupación por el derrotero que viene teniendo la campaña, según manifestó a varios interlocutores en reuniones reservadas, viró del hermetismo silente a la ofensiva contra su rival para la gobernación, Darío Giustozzi.
Esto se cristalizó anoche, cuando De Narváez encabezó el Plenario del FR en la Tercera Sección que tuvo lugar en Valentín Alsina (Lanús), organizado por los dirigentes massistas que apoyan su candidatura a la gobernación en el Conurbano sur -que no son todos-.
El plenario fue organizado por el diputado Marcelo D’Alessandro y participaron el rector de la UNLZ, Diego Molea, el concejal y candidato a intendente local, Nicolás Russo, dirigentes no peronistas como el ex ‘lilito’, Walter Martello, entre otros referentes de varios distritos de la Tercera.
Fuentes del massismo relataron a Noticias Urbanas que el acto de anoche -cuya concresión fue mal vista por Massa, especialmente por el momento delicado con Giustozzi- tenía otro destino de realización cuando comenzó a planearse: De Narváez quería que sea en Almirante Brown.
Por pedidos que vinieron desde Tigre, se trasladó a Lanús -a pesar de la reticencia de De Narváez- y finalmente anoche a última hora se realizó en paralelo con la presentanción del e-book de Massa.
En el plenario, De Narváez aseguró que “el 10 de diciembre va entrar en la Provincia un gobierno peronista y va a salir una gran agencia de publicidad”, y expresó que “en estos últimos diez años” dedicó su vida “a un objetivo, que es transformar para bien la vida de los bonaerenses”.
Luego, en medio del fervor reinante, arengó al sostener que “el corazón de esta batalla está en la Provincia y en la Tercera Sección Electoral”, y llamó a hacer “un esfuerzo para llegar a la unidad”.
La apertura estuvo a cargo de D`Alessandro, encargado de dejar en claro el objetivo de la reunión, que era marcarle la cancha a Giustozzi y exhibir que en la propia Tercera Sección cuenta con adversarios: “No venimos a dividir, venimos a unir a los compañeros detrás de las candidaturas de Sergio Massa y de Francisco de Narváez”.
Mientras tanto, Giustozzi se mostró este miércoles por la noche con Massa en el Museo de Arte de Tigre -se sentó a su lado- pero no quiso hablar con los medios. Nada cambia por ahora: el hombre fuerte de Almirante Brown sigue a la espera de que Massa avale su solicitud de ser el candidato único a la gobernación, con lista de unidad de legisladores, y que De Narváez ocupe otro rol (en la boleta del Parlasur o ser candidato delasotista en la Provincia). Para el giustozzismo -que acusa presión desde las bases por ciertos “destratos” de Massa y el denarvaízmo- el tiempo se acaba.