Un caso de gatillo fácil golpeó este lunes a la Policía Metropolitana. Se trata de Lucas Cabello, de 20 años, quien recibió tres disparos de un arma de fuego por parte de un agente de la PM, cuando se encontraba en la puerta de su casa, en el barrio porteño de La Boca. Sin embargo, y a contramano de lo que indican familiares y vecinos, desde la fuerza de seguridad buscan instalar que el hecho fue consecuencia de un tiroteo.
Según sostienen desde la Metropolitana, Cabello se encontraba violando una restricción domiciliaria por violencia de género y fue ahí cuando se produjo el tiroteo. Algo que la pareja de la víctima, quien fue testigo de lo sucedido, desmintió. Incluso, asegura que el oficial de la PM le disparó al joven de 20 años en la nuca, estando ya en el piso.
“Lucas se había ido a comprar algo para comer y cuando volvió vi que discutía con el policía que está en la puerta. Le disparó en la nuca y cuando se cayó en el piso le disparó dos veces más”, contó Camila aInfojus Noticias. Y agregó que no esperó a que llegara una ambulancia: con la ayuda de un vecino lo llevó a su novio herido hasta el hospital.
Por su parte la madre del joven baleado afirmó que en la puerta del hogar siempre hay un policía de consigna por un caso de violencia de género pero que Lucas no está involucrado, ni tiene sobre el alguna restricción judicial.
“Mi hijo está peleando por su vida y encima lo quieren ensuciar. No fue un enfrentamiento narco ni un tiroteo”, dijo a Infojus Noticias, Carolina Vila, madre de Cabello.
El padrastro de Lucas, y su madre, dijeron que fueron hasta la comisaría 24 para hacer la denuncia pero no los recibieron. Después de esto se acercó Camila y tampoco la escucharon, pese a que había sido testigo.
La defensora del agredido, Gabriela Carpinetti, se presentará en la Fiscalía de La Boca para que la tomen como querellante en la causa, en representación de Lucas. “No es verdad que el violó una restricción del hogar. Hay muchos testigos del hecho”, señaló.
En tanto, al enterarse de esto, los vecinos de Lucas, quien los fines de semana cuida autos en el restaurant Il Martterello y, como su familia, salieron a las calles en reclamo de justicia. Según dicen, no es el primera vez que la Policía Metropolitana se ve vinculada a una situación de violencia institucional.
En las últimas horas, el oficial acusado de balear a Lucas Cabello fue detenido y será indagado de forma inminente.