Creada hace más de 7 años por el entonces juez en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad Roberto Andrés Gallardo para atender todas las causas judiciales que tuvieran relación con reclamos por el cumplimiento del derecho a una vivienda digna, un ambiente saludable o la provición de los servicios mínimos y elementales en las villas porteñas, la Secretaría ad hoc de “Derechos Sociales y Económicos”, mejor conocida como la secretaría villera, sufrirá cambios en breve. Tras la creación de 9 nuevos juzgados contenciosos, la culminación de los concursos y la inminente designación de los nuevos jueces, desde el PRO se impulsa la modificación a este esquema de concentración y tramitación de causas vinculadas con las villas de la Ciudad de Buenos Aires.
Semanas atrás, miembros de la Vicaría Episcopal para las villas porteñas, funcionarios de la Defensoría General de la Ciudad y diversas organizaciones sociales marcharon al Consejo de la Magistratura porteño para reclamar que no se desmantele la secretaría villera (la cual desde que Gallardo asumió como Defensor General Adjunto en lo Penal Contravencional y de Faltas de la Ciudad está a cargo de la jueza Elena Liberatori) sino que se fortalezca.
Ante este pedido, y tomando como principal interlocutor a quienes representando a la Iglesia Católica realizan un fuerte trabajo territorial en los asentamientos porteños, desde el macrismo se diseñó una propuesta para la reestructuración de la secretaría villera en la que se presentan tres opciones diferentes a la hora de definir quién será el juez que resuelva las causas.
De acuerdo al texto del proyecto presentado ante los curas villeros por el consejero de la Magistratura de la Ciudad Sebastián De Stéfano (ex miembro de la Corporación Sur y representante del radicalismo PRO que lidera Daniel Angelici), la actual Secretaría ad hoc de Derechos Sociales y Económicos pasaría a llamarse “Secretaria de Población en Asentamientos Precarios”.
A diferencia del actual esquema de funcionamiento de la secretaría villera, la cual funciona dentro del juzgado N˚2 CAyT, la nueva secretaría especial para villas no sería parte de un juzgado en particular sino que dependerá orgánicamente de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario y, según expresa el proyecto al que tuvo acceso Noticias Urbanas, “prestará asistencia técnica, asesoramiento y colaboración a todos los Juzgados de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo y Tributario que intervengan entendiendo en cuestiones relativas a grupos vulnerables que viven en asentamientos barriales precarios”.
“La problemática social de estos barrios de la ciudad, amerita un tratamiento específico y políticas públicas destinadas a proteger a aquellas personas en situación de vulnerabilidad ya que debido a su situación potencialmente se encuentran ante mayores riesgos. A dicho fin se profesionalizara y especializara a los funcionarios y empleados a fin de que en el desempeño de sus tareas brinden un mejor servicio de calidad a las personas que lo requieran”, detalla la iniciativa.
Frente a una de las mayores críticas realizadas al macrismo, tanto desde los curas villeros como de la Defensoría General y agrupaciones sociales, por la posibilidad de que las causas relacionadas con derecho a la vivienda, urbanización, etc. pierdan la jurisprudencia marcada por Gallardo y continuada por Liberatori, y sean atendidas y repartidas entre los 24 juzgados contenciosos, el PRO presentó tres opciones para el análisis de los integrantes de la Vicaría Episcopal de las villas porteñas.
El proyecto, entregado al sacerdote de la Parroquia Santa María Madre del Pueblo de la Villa 1-11-14, Gustavo Carrara, para su distribución y análisis entre los casi 20 curas villeros que trabajan en la Ciudad, propone como primera opción que todas las causas vinculadas con las villas sean asignadas a un juez “por sorteo mediante el uso del sistema informático JusCABA CAyT entre todos los Juzgados de Primera Instancia del Fuero Contencioso Administrativo y Tributario de la CABA” (esta es la opción más criticada tanto por curas como por defensores públicos).
Una segunda posibilidad para la implementación de la nueva secretaría especial villera –y que podría recibir el visto bueno de los curas villeros y del propio Cardenal Bergoglio- plantea “contar con un (1) Juzgado de Primera Instancia que entienda en todos los asuntos correspondientes a cada uno de los principales asentamientos de la ciudad”. En el caso que esta sea la opción elegida por los curas villeros, podrían definirse un grupo de juzgados, unos 5 o 6 jueces que se especializarán, cada uno, en las problemáticas de una gran villa de la Ciudad (la 31, la Rodrigo Bueno, la 1-11-14, la 21-24 y la villa 20, por ejemplo).
La tercera opción propuesta a los curas consiste en que “las causas se asignan por sorteo entre los Juzgados del número 15 al veinticuatro”, aquellos nuevos juzgados que se pondrán en breve en funciones y que se encontrarán en manos de jueces recientemente concursados y que contarán con el acuerdo de las diversas fuerzas políticas que conforman la Legislatura.
“En cualquiera de los tres (3) esquemas planteados en su intervención, los Juzgados contarán con la asistencia técnica, asesoramiento y colaboración de la Secretaria de Población en Asentamientos Precarios dependiente de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad”, resalta la propuesta.