“Ayer tomé la decisión de bajar mi precandidatura a jefe de Gobierno”, confirmó este viernes el senador macrista Diego Santilli, quien según las encuestas se ubicaba en un digno pero lejano tercer puesto, dentro de una interna que tiene como principales animadores al jefe de Gabinete de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta y a su compañera de bancada en la Cámara Alta, Gabriela Michetti.
Tal como explicó el legislador Agustín Forchieri, santillista de la primera hora, a Noticias Urbanas el foco de “El Colo” -de hoy en adelante- estará puesto en la campaña presidencial de Mauricio Macri. A pesar de que, según dijo a radio La Red, “fue duro” deponer su ambición de suceder al líder del Pro. “Tenía ganas de seguir adelante, jugar hasta el final”, confesó.
Sin embargo, en lo que pareció un tiro por elevación a Michetti, lanzó: “No podemos cada uno de nosotros pensar en lo personal y no en lo general, Macri necesita que trabaje por su presidencia”.
En relación a la situación nacional del macrismo, Santilli afirmó que en la actualidad “el Pro tiene 150 mil voluntarios”, pero “hay que llegar al millón”. Esta meta, obviamente, tiene que ver con la obsesión de tener garantizado un eficiente sistema de fiscalización de cara a las presidenciales de octubre.
Por otra parte, el ex hombre fuerte de la Legislatura porteña reconoció que el vicepresidente de Macri “podría ser del interior”. “La fórmula no tendría que ser sólo con representantes de esta Ciudad”, consideró Santilli, quien a su vez afirmó: “(el senador Carlos) Reutemann puede ser un buen compañero de fórmula”.
