Juan José Gómez Centurión, que estaba al frente de Aduanas y fue desplazado por decisión del Gobierno rompió el silencio. Dijo que las acusaciones en su contra forman parte de una “operación delictiva y mafiosa, con participación de gente que perteneció a los servicios de inteligencia”.
La denuncia partió de una serie de audios que fueron enviados por un anónimo al Ministerio de Seguridad y ya están en manos del juez Ariel Lijo, que recibió el requerimiento como averiguación de delito. Se trata de conversaciones que revelan un presunto entramado para lucrar con actividades relacionadas al comercio a través de la Aduana.
“Soy víctima de ex espías y de la mafia del contrabando”, sentenció, y agregó: “No tienen sustento, ninguna de las dos. Están hechas con grabaciones editadas, en la primera pericia que hicimos ya nos surgió que tienen un alto grado de edición, con voces insertadas. La Justicia rápidamente va a establecer el disparate de las pruebas presentadas”, dijo en diálogo con Perfil.
El ahora exfuncionario aseguró que los servicios de inteligencia estarían detrás de la presentación que le costó el cargo. “Es el viejo modelo SIDE, una denuncia absolutamente inconsistente pero que es un fusilamiento mediático”, explicó a Clarín.
“Lo que buscan es inhabilitar a un funcionario y un equipo que avanzan sobre temas que molestan a mucha gente poderosa. Ya venía escuchando hace tiempo que había un grupo de pseudo empresarios, dedicados a las actividades delictivas en comercio exterior, que estaban buscando un equipo de los servicios de inteligencia para armar una operación”, explicó.
En este marco, Gómez Centurión detalló que hay “cuatro núcleos complejos”, sobre los que avanzó durante estos meses al frente de la Aduana y, supone, podrían haber montado la presunta operación. Habló de sectores de los depósitos fiscales a los que se les revocaron las habilitaciones y del Aeropuerto de Ezeiza, donde, dijo, reinaba el contrabando. También sospecha de los afectados por la causa de Alejandro y Raúl Paolantonio, que se dedicaban a traer mercadería prohibida desde China, y recordó, por último, una denuncia que realizó esta semana por un fraude de 14.500 millones de dólares con las DJAI.
“Yo sabía que ir por las mafias iba a traer consecuencias”, afirmó. Y agregó: “Yo voy a contestar en la Justicia. Después voy a volver a la Aduana para terminar con todas la mafias”.