Lo que muchos pronosticaban –y sostienen- que sucedería en la Ciudad entre la UCR y el Pro está al fin sucediendo. Es que tras la sorprendente elección de Martín Lousteau desde ECO y la posterior alianza a nivel nacional entre la UCR y el Pro, quienes ya vieron alianzas formarse y deshacerse en segundos pronosticaron chisporroteos entre ambas fuerzas a nivel distrital.
Es que nadie avizoraba cómo se plantearía el radicalismo para ser socio del Pro en la nación, pero oposición en la city porteña. En diálogo con Noticias Urbanas, el legislador Marcelo Guouman explicaba en febrero: “Nosotros vamos a representar a los ciudadanos que nos votaron, y vamos a trabajar para que lo que propusimos en la campaña se convierta en políticas públicas”.
Ahora, el Comité Capital de la UCR sacó un documento donde critica con dureza al gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, al que acusan de tener un “funcionamiento corporativo”.
En el texto, los radicales advierten que “son muchos los desafíos pendientes en nuestra ciudad y muchos los que necesitan una respuesta urgente”. Y agregan: “Sin embargo nos encontramos con un gobierno, en la ciudad, desinteresado por el diálogo con aquellos partidos que integran Cambiemos a nivel nacional. El diálogo, entendido como “la construcción de puentes” no es el trato cordial, sino el intercambio de opiniones distintas para que en conjunto podamos sintetizar la mejor de las acciones, la mejor manera de gobernar nuestra ciudad”.
“Alertamos sobre el personalismo y el funcionamiento corporativo del PRO en la ciudad, el cual, de persistir, lo alejará definitivamente de la sensibilidad social necesaria para gestionar con justicia los recursos del estado”, afirma luego el documento aprobado por la convención porteña.
Y sigue: “No vivimos, los argentinos, las horas más alegres. Sin embargo creemos en la voluntad popular de acompañar un proceso que le devuelva a la república condiciones políticas económicas y sociales para vivir en un país más justo, más solidario y garante de igualdad, de todos, frente a la Justicia”.
“Esta voluntad no es la mansedumbre del resignado, sino la vocación de aportar al bien común, con un tiempo determinado y un esfuerzo que pretende, sin duda, ser compartido. El tiempo, como siempre, lo marcará la política. Queremos decirle a los vecinos de la ciudad que seguiremos en nuestro trabajo para que Buenos Aires Evolucione. Y nuestro partido, junto a su marco de alianzas, acompañando el proyecto de ECO trabajará para la inclusión de nuestras ideas y propuestas en el necesario diálogo político, hoy tan ausente del escenario porteño”, apuntan luego.
Por último, el documento advierte: “No es un pedido el diálogo, es una necesidad del buen gobierno”.
Así las cosas, desde la UCR esperan ahora la respuesta del Gobierno, preparados para comenzar la campaña con vistas a 2017, donde esperan ampliar el bloque legislativo.
Como carta letal, el radicalismo tiene en claro a qué juega. Sabe que si el Pro no abre un verdadero canal de diálogo y los incluye en la toma de decisiones, los boinas blancas pueden arrastrar al partido amarillo a su deporte por antonomasia: las internas dentro de un mismo espacio.