Tras una oleada de especulaciones sobre cómo afectarían los resultados de las elecciones legislativas que se llevaron a cabo el pasado domingo 22 y cuáles serían las reformas que el Gobierno se envalentonaría a hacer, este lunes el presidente Mauricio Macri cortó la intriga y el silencio.
Aunque algunas de las decisiones que el mandatario, junto a su equipo de Gobierno, tomaría habían trascendido.
Ante un auditorio multisectorial constituido por empresarios, gobernadores, gremialistas, dirigentes opositores, jueces, académicos y líderes religiosos, Macri anunció reformas de todo tipo: “Tenemos que avanzar en reformas donde cada uno ceda un poco, empezando por los que tiene poder, y no sólo hablado de la política. Y tenemos que hacerlo en base a la confianza, con buena fe, sin doble discursos, abandonando etiquetas y prejuicios para que ese diálogo fluya”.
El presidente utilizó el viejo recurso de leer el discurso en teleprompters transparentes, cuya redacción estuvo a cargo de Alejandro Rozichtner, Hernán Iglesias Illa y Julieta Herrero, y hasta hubo intervenciones de Mario Quintana, Gustavo Lopetegui, Fernando de Andreis y Marcos Peña, y el propio Macri pidió cambiar algunas partes.
El programa de cambios lo planteó en tres ejes: “Responsabilidad fiscal, la inflación y los impuestos”; creación de “empleo de calidad y la reforma previsional” y una refundación de la “república y la calidad institucional”.
“El primer eje es la responsabilidad fiscal, inflación e impuestos: no podemos gastar más de lo que recaudamos. Tenemos que comprometernos”, dijo, y agregó: “Necesitamos un Nunca Más para la inflación. El segundo eje es favorecer el empleo: necesitamos más y mejores trabajos para millones de argentinos, que fomenten el empleo privado formal”. Por último, advirtió que el tercer eje se refiere incluye reformas en la justicia y el sistema electoral.
El segundo punto tuvo que ver con el empleo y la importancia de reducir el empleo “en negro”: “Creemos el trabajo como eje del proyecto de vida de las personas. Necesitamos más y mejores trabajos para millones de argentinos. Entonces avancemos hacia un esquema de reglas de juego que fomenten el empleo privado formal“.
Mientras tanto, el tercer ítem estuvo relacionado con “la República y la calidad institucional”: “Queremos comprometer a todos los sectores a colaborar en el fortalecimiento de la República y a construir un Estado que no esté al servicio de la política, de sus funcionarios o de sus gremios, sino al servicio de los argentinos. Esto incluye reformas en la Justicia, en el sistema electoral y en iniciar un camino de transparencia e integridad para prevenir y castigar la corrupción“. Y luego se dirigió directamente a los gobernadores: “les quiero pedir que avancen y demuestren su compromiso con la transparencia”.
Asimismo, esta reforma pretende romper con los privilegios de uno de los poderes del Estado más conservadores: el Judicial, a quien le pidió que dé el ejemplo y reduzca la cantidad de días de las ferias de verano e invierno (días no laborables).
Cabe recordar que este es un debate que se viene librando desde que Germán Garavano asumió como ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, quien coincide con la línea de pensamiento del Presidente: “No puede ser que durante 45 días esté suspendido el servicio de Justicia. Qué bueno que sería que la Justicia dé el ejemplo y se replantee estas interrupciones, que modernice sus procesos“.
Macri resaltó así que el Poder Ejecutivo presentará el próximo miércoles ante el Congreso un proyecto de reforma del sistema tributario y que también se abrirá una mesa de discusión para reestructurar el sistema previsional y para eliminar las jubilaciones de privilegio.
Al referirse al sistema impositivo, Macri afirmó que Argentina debe bajar la carga tributaria porque “tenemos impuestos muy altos” y modificar “el sistema impositivo engorroso y poco equitativo” que presiona a los contribuyentes.