Rosarino e hincha de Rosario Central, Lucas Llach, el flamante compañero de fórmula de Ernesto Sanz de cara a las PASO en las que competirán contra el jefe de Gobierno Mauricio Macri y la diputada nacional Elisa Carrió, podría definirse como un personaje excéntrico.
Hijo del sociólogo, economista y ex ministro de Educación de la Nación, Juan José Llach, Lucas, de 43 años, trabaja como director y profesor en la exclusiva Universidad Di Tella, es amante de la comida denominada “paleo” y también del “running”, pero con una particularidad: pertenece a la corriente de los que eligen “correr descalzos”.
La comida paleo remite a la época paleolítica, y consta de ingerir alimentos que sólo se pueden cazar o encontrar. Tan en serio se toma el tema el ahora precandidato a vicepresidente de la Nación que, no sólo había lanzado un blog titulado Alimentación Sapiens: un experimento, sino que hasta ideó el primer restorán paleo del país. Se trata de Como Sapiens, un restó escondido en Recoleta, donde las mesas son comunitarias y trabaja sólo los viernes y con reservas.
Entre sus libros se destacan El ciclo de la ilusión y el desencanto: un siglo de políticas económicas argentinas y Entre la equidad y el crecimiento, ambos escritos junto a Pablo Gerchunoff.
Cuando los 140 caracteres de Twitter, otra de sus pasiones, le quedan cortos, Llach va más allá en su blog de La Nación “Ciencia Maldita”. Justamente en Twitter se mostró feliz con la decisión de Sanz.