El Gobierno nacional le traspasó las distribuidoras de energía eléctrica del área metropolitana de Buenos Aires, Edenor y Edesur, a la Ciudad y la Provincia.
Las administraciones que conducen Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal asumirán los derechos y obligaciones de los contratos de concesión, previa aprobación por parte de la legislatura de la Ciudad y la publicación de un decreto por parte del ejecutivo provincial.
En un comunicado oficial, el Ministerio de Hacienda informó que el acuerdo “no tendrá costos” para el Estado nacional al tiempo que Edenor y Edesur deberán realizar obras para mejorar el servicio por $7.000 millones.
Asimismo, las compañías se comprometen a realizar inversiones en obras de infraestructura para la mejora de la seguridad y confiabilidad del servicio por $ 3.000 millones en el caso de Edenor y $4.000 millones en el caso de Edesur. Estas inversiones, que son adicionales a las acordadas en la Reforma Tarifaria Integral (RTI) y tendrán que realizarse en un plazo de cinco años, serán supervisadas por el nuevo ente regulador.
Adicionalmente, la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires acordaron la creación de un nuevo organismo de control que será denominado Ente Metropolitano Regulador del Servicio Eléctrico (EMSE), que designará sus autoridades una vez que el traspaso esté refrendado en ambas jurisdicciones.