Mientras desde el macrismo lo acusan de tener “mucho de kirchnerismo”, y rechazan ir a una gran interna opositora junto a su fuerza, tanto en la provincia de Buenos Aires como a nivel nacional, el líder del Frente Renovador, Sergio Massa se plantó firme y disparó: “No puedo formar parte de un espacio que cree que la gente se gasta los planes en chupi y juego”.
En ese sentido, el diputado nacional explicó en diálogo con radio La Red: “Yo quiero discutir si volvemos al país de Cavallo, del ajuste, o si vamos al país de Lavagna, con desarrollo e inclusión. Yo quiero ir al país de Lavagna. El resto es marketing. Tenemos que darle certidumbre a la gente y dejar las discusiones vacías. Yo quiero que continúe la asignación universal, por ley”.
“A mí lo primero que me tienen que decir es ‘dale vení, vamos a discutir cómo le ganamos a la inseguridad’; ‘dale, vení, vamos a discutir cómo mejoramos la inseguridad’. A esa convocatoria estoy abierto, a discutir carguitos, no”, advirtió el ex intendente de Tigre.
Posteriormente, en comunicación con radio Con Vos, Massa aclaró que confluir con el macrismo no fue idea suya. “Yo no propuse nada. Eso lo propusieron algunos dirigentes de nuestro espacio así como otros dijeron que no”, recordó, en referencia al precandidato a gobernador bonaerense Francisco De Narváez.
“Nosotros estamos construyendo una fuerza a nivel nacional más allá de la opinión de un dirigente y lo que no estamos haciendo es festejos con globitos todo el tiempo”, clausuró el tema con ironía.
Finalmente, el candidato presidencial aseguró que “más allá de los deseos de algunos” no declinará su postulación para competir por la gobernación bonaerense. “Para cambiar el conurbano hay que gobernar la Argentina”, aseveró.
