El encargado de prensa de los metrodelegados informó hoy que los trabajadores diseñaron un plan de contingencia para que la Línea A no deba cerrar durante el proceso de cambio de vagones. “Nosotros hemos elaborado un plan alternativo“, dijo Enrique Rosito.
Y agregó: “Nosotros hemos elaborado un plan alternativo, que es seccionar la línea. Es decir, que la línea circule con los coches viejos entre Primera Junta y Plaza de Mayo, mientras se trabaja con los coches nuevos. Luego habría que cerrar la línea por dos o tres días para terminar de cambiar los vagones.”
Los nuevos coches de la línea A tienen un voltaje diferente, los trenes nuevos vienen con 1500 voltios”, explicó el metrodelegado en diálogo con Radio La Red y aclaró que los vagones viejos podrían “servir para una finalidad social, algo que los convierta en útil para los porteños que siguen siendo los dueños del subterráneo.”
En tanto, al ser consultado sobre la opinión de los trabajadores respecto del aumento de la tarifa que pondrá de base el Gobierno de la Ciudad, y que hoy en conferencia de prensa el Jefe de Gobierno sostuvo que rondaría los 6 pesos, Rosito expresó: “Hasta que no se realice la auditoría económica y financiera que establece la ley del traspaso del subte no se pueden dar cifras. Pero la tarifa técnica va a estar lejos de $6”.