El vicepresidente Amado Boudou sufrió un nuevo revés judicial, esta vez de la Cámara Federal porteña, que convalidó la declaración de un empresario en la causa en la que se investigan presuntas “dádivas”.
Se trata del empresario Marcelo Scarmellini, quien declaró haber transportado al vicepresidente en un vuelo en helicóptero gratuito hasta la localidad bonaerense de Necochea como una “gauchada”. Los camaristas Horacio Cattani y Martín Irurzun respaldaron la declaración como “testigo” y no como “imputado” de un delito, tal como había planteado la defensa de Boudou y la fiscalía, a cargo de Carlos Rívolo.
El mencionado vuelo ahora bajo investigación se produjo el 17 de diciembre de 2011.
La Sala Segunda de la Cámara dejó abierta la posibilidad de que Scarmellini sea citado a indagatoria, lo que terminaría exhibiendo una situación similar a la de Nicolás Ciccone en la causa en la que se investigan irregularidades en el rescate de la imprenta.
En esa causa, en la que Boudou está procesado, Ciccone declaró primero como testigo y luego como acusado, y hoy afronta una situación procesal similar a la del vicepresidente.