Posse está en alerta. Y así se lo hizo saber a su entorno de confianza. Tiene más definido que nunca dejar el año que viene la municipalidad de San Isidro y ser precandidato a gobernador bonaerense, pero si analiza hacerlo con su espacio propio, Acción Vecinal, y con una boleta corta sin fórmula presidencial, si las condiciones no lo satisfacen.
Según pudo saber Noticias Urbanas, el histórico intendente de la zona norte del conurbano profundizará su instalación ante el electorado bonaerense con dirigentes propios “en todos los distritos donde pueda”, y por ello impulsa a su hermano menor, Mario (un abogado que trabaja en un exitoso estudio jurídico porteño), como armados y candidato en el municipio de San Fernando, actualmente gobernado por el ultramassista Luis Andreotti.
Además, en Vicente López, el único distrito bonaerense gestionado por el Pro de la mano de Jorge Macri y en donde le massismo tiene un incipiente armado propio, Posse postula localmente a Alberto Expósito, hombre de su confianza.
Posse manifestó su incomodidad por la posible llegada de l diputado kirchnerista Martin Insaurralde al FR en voz alta ya varias veces pero, ante los suyos, ya anunció que “si las condiciones no están dadas” para una competencia leal en primarias con el lomense, no descarta “ir a las PASO con boleta corta siendo candidato único” con su marca electoral propia, Acción Vecinal.
Si bien el desarrollista aún reconoce a Sergio Massa como su precandidato presidencial, difiere con él en la estrategia de darle la bienvenida a Insaurralde (y otros jefes comunales que traería consigo, como Pablo Bruera), y teme por un Frente Renovador “desperfilado que caiga en la frivolidad”.
Desde el possismo se ilusionan con que, llegado el caso de armar una lista propia, se lleven consigo al también disconforme intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino, enojado con Massa desde que incorporara a al intendente de Merlo, “El Vasco” Othacehé, histórico rival.
Tampoco descartan, en caso de ir con boleta propia, dirimir en ciertos distritos a través de primarias las listas locales. Se definirá en mayo próximo, semanas ante del cierre de listas y en medio de las febriles negociaciones.
Con esto, Posse juega fuerte ante Massa para presionar para que Insaurralde no se sume, sabiendo que su apellido no precisa de instalación en la Primera y Tercera Sección del conurbano (que aglutina a 8 millones de votantes) y que podría provocarle una dolorosa sangría de votos al FR, especialmente en San Isidro, Vicente López, San Martín, San Fernando y Malvinas Argentinas.
Eso sí, la bala de plata final se la guarda. Ya avisó Posse que en el último lugar donde estaría dispuesto a impulsar un armado local es en Tigre.
