El Gobierno nacional trata de retomar la iniciativa política y al mismo tiempo busca ampliar la mesa chica de toma de decisiones sumando a nuevos integrantes. Siguiendo ese plan de acción, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, se reunió este miércoles en la residencia de Olivos con el ministro de Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio; el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y el referente de la UCR, Ernesto Sanz.
Este último, uno de los artífices de la alianza Cambiemos, y el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, volvieron a la “mesa chica” del presidente Mauricio Macri, en el marco del cambio de estrategia política del Gobierno. Fue el mismo oficialismo que difundió, pasado el mediodía, la foto de Sanz y Monzó, en la residencia de Olivos.
Los coordinadores de la Jefatura Gabinete, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, seguirán ocupando un rol en la mesa chica a pesar de las nuevas incorporaciones.
La vuelta de Sanz, expresidente de la UCR y pieza fundamental en el nacimiento de Cambiemos, tuvo que ver con un pedido que le formularan el actual líder de los radicales y gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, y su par de Jujuy, Gerardo Morales, al jefe de Gabinete, según confiaron desde su entorno.
La imagen de la mesa chica de toma de decisiones de Cambiemos se dio luego de que el presidente Mauricio Macri optara por reincorporar a Monzó y Sanz, quienes tiempo atrás habían sido excluidos de ese ámbito, consignó Noticias Argentinas.
Además de la restructuración del círculo de su mayor confianza, el jefe de Estado también decidió ampliar la mesa política de Cambiemos con gobernadores radicales como Morales, que este martes visitó Olivos.
Si bien estaba previsto que el secretario de Fortalecimiento Institucional de la Jefatura de Gabinete de Ministros y referente de la Coalición Cívica, Fernando Sánchez, se integrara a la “mesa chica”, el dirigente cercano a Elisa Carrió no participó de la foto.