Desde que el presidente del bloque massista en Diputados eligió al diario Clarín para expresar sus quejas por un probable pase del lomense (con amenaza de partida incluida), se tejieron todo tipo de hipótesis sobre el futuro de Giustozzi.
Pero Massa salió este martes a realizar un operativo contención para evitar que la crisis interna derrape, y citó en sus oficinas de Tigre a Giustozzi, con la excusa de “repasar la agenda legislativa y lo hecho en el Congreso”, informaron desde el massismo.
“Le devolví la gentileza (a Massa) con esta visita, porque hace unos días había estado en Almirante Brown”, dijo el intendente en uso de licencia, mientras visitaba junto a su jefe político polideportivos en donde se realizan colonias de invierno.
Giustozzi volvió esta mañana a Buenos Aires tras unos días de viaje y se dirigió a encabezar un encuentro parlamentario con sindicalistas, tras lo cual se trasladó a Tigre y mantuvo un prolongado encuentro a solas con Massa.
La difusión de esa interna causó malestar en el massismo, aunque desde el comando de campaña buscaron bajarle el tono a la crispación y salir a contener a Giustozzi, tras un fin de semana en el que el precandidato a gobernador Felipe Solá le había echado leña al fuego al decir que “los asuntos con Massa” él los arreglaba “en privado y no en los medios”.
Un intendente del sur provincial dijo a Noticias Urbanas que a Giustozzi “lo quieren dentro del partido, aunque de vez en cuando se lo tiene que acomodar”, mientras que un ex diputado bonaerense y actual operador massista señaló que “la fórmula para gobernador se pensará en marzo próximo recién y habrá primarias sea como sea”.
Desde Almirante Brown buscaron distender la situación y explicaron a Noticias Urbanas que “Giustozzi cree en la palabra de Massa, que asegura que lo de Insaurralde son puras operaciones mediáticas” y descartaron una partida del FR.