Este martes, María Eugenia Vidal desistió de su intención de desdoblar las elecciones en la Provincia. Ergo, las y los intendentes peronistas y kirchneristas celebraron la noticia y vislumbran una boleta nacional con Cristina Fernández de Kirchner, cuya imagen continúa creciendo positivamente y superando a la de la Gobernadora. Es que, además, ahora tendrán más tiempo para poder pulir un candidato/a a mandatario provincial, que será consensuado entre el cristinismo/kirchnerismo y el pejotismo duro.
La decisión de Vidal fue confirmada por una alta fuente a NU, asegurando que “Heidy” prefería que las elecciones provinciales se hagan en conjunto con la presidencial, para evitar que la gente deba ir a votar más veces que las que ya tiene que ir por las elecciones nacionales, además del gasto que implica llevar a cabo las elecciones.
Ante la noticia, trascendió que los intendentes vieron la luz al final del túnel ya que Cristina tiene intención de voto mayor al 70 por ciento en algunas localidades de la tercera sección electoral; mientras tanto, Vidal quedará atada a las repercusiones de las medidas que el presidente Mauricio Macri tome en el arco nacional, que ya viene restándole imagen positiva a la Gobernadora.
Es que fue “la leona” quien, en pos de apaciguar el golpe económico de los tarifazos en los servicios públicos, incentivó a que otras provincias tomen su ejemplo y alivien a los usuarios eximiéndoles del pago de ingresos brutos. Costo que lo absorbe el Estado provincial en vez del consumidor final. Vidal entiende que no es momento para mayores gastos y que el ajuste debe ser integral, por o que desdoblar las elecciones sería un gasto que no estaría en condiciones de poder afrontar sin descuidar a las y los bonaerenses. Hay que tener en cuenta que con el desdoblamiento de las elecciones de la Provincia y de las intendencias (como también se planeaba), la gente iba a tener que enfrentarse a las urnas es al menos ocho oportunidades entre las PASO, las generales y eventuales balotajes.
El mismo presidente del PJ Bonaerense, Gustavo Menéndez, salió a opinar sobre la decisión de Vidal: “La suspensión del desdoblamiento refuerza la idea de que era un simple oportunismo por parte del oficialismo”.
Y agregó: “Nosotros estuvimos trabajando desde nuestro partido con juristas y constitucionalistas porque verdaderamente era un despropósito malgastar más de 3 mil millones de pesos en un desdoblamiento innecesario”.
Que suerte que terminaron con la #CortinadeHumo del desdoblamiento. Espero que la gobernadora @mariuvidal se deje de especular y se ponga a intentar solucionar los graves problemas que tienen los bonaerenses en en estos 10 meses que le quedan.
— Fernando Espinoza (@FerEspinozaOK) January 29, 2019
En tanto, Fernando Espinoza, exintendente de La Matanza y asesor político de su actual intendenta Verónica Magario, también tuvo qué decir: “Que suerte que terminaron con la #CortinadeHumo del desdoblamiento. Espero que la gobernadora @mariuvidal se deje de especular y se ponga a intentar solucionar los graves problemas que tienen los bonaerenses en en estos 10 meses que le quedan”.
Massa se quedó sin el desdoblamiento
Originalmente, el desdoblamiento de los comicios fue una iniciativa del líder del Frente Renovador, Sergio Massa, a quien conformaron desde el oficialismo con la creación de una bicameral no vinculante que se dedicaría al estudio de los proyectos presentados sobre este tema, presidido por Manuel Mosca.
Estaba previsto que en febrero esta bicameral decidiera si el desdoblamiento se realizaría o no. Y así fue, pero la respuesta, como era de esperarse, no cayó bien en el massismo.
Incluso, el mismo diputado del Frente Renovador, Ricardo Lissalde, se quejó: “Vidal no decide. Vidal obedece. Macri decidió seguir usando a los bonaerenses poniendo los problemas de la Provincia en el patio trasero”.
Que un intendente sea el gobernador
“Queremos que un intendente o intendenta sea gobernador de la Provincia”, dijo nadie menos que el vicepresidente del PJ Bonaerense, Fernando Gray.
“Insaurralde, Magario o Paco Durañona como candidatos en Provincia nos representarían muy bien”, evaluó el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis.
Y agregó que también “sería una decisión correcta” que el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, encabece la nómina de diputados nacionales por el distrito bonaerenses, armador designado por su madre Cristina para de Unidad Ciudadana en cada distrito.
Por otro lado, el candidato que crece en punta es el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, que compite con otra posibilidad externa a este plan de “intendentes al poder”: Axel Kicillof, pero que corre con la desventaja de provenir de la Ciudad. Insaurralde ya cuenta con experiencia política en el Conurbano y fue primer candidato en las legislativas de 2013, lo que le otorgó el conocimiento necesario para ir por la gobernación y, además, nunca rompió su relación con el kirchnerismo a pesar de que coqueteó con Massa tras aquella elección.
Además, según cuentan, su relación con Máximo Kirchner pasa por buen momento, clave para tener el visto bueno de CFK, quien en definitiva será la guía espiritual que con su poder político ilumine el camino de sus candidatxs hasta las urnas, donde espera nadie menos que la candidata con mayor imagen positiva del país -aunque en declive- y cuya suerte quedará atada a las maniobras de un devaluado Presidente.