Cómo será la nueva Plaza de Mayo

Cómo será la nueva Plaza de Mayo

Este viernes el Gobierno porteño presentó el proyecto ganador del concurso para la remodelación de la Plaza de Mayo y su entorno inmediato para el Bicentenario. El piso será íntegramente de granito gris y se colocarán infinidad de luces, reduciendo casi a su mínima expresión los espacios verdes que actualmente hay en la Plaza. La diputada lopezmurphista Marta Varela criticó el proyecto


Acompañado por Juan Pablo Schiavi (ministro de Infraestructura y Obras Públicas) y Silvia Fajre (ministra de Cultura), el jefe de Gobierno porteño, Jorge Telerman, presentó este viernes una conferencia de prensa donde reveló el proyecto ganador del concurso para la remodelación de la Plaza de Mayo y su entorno inmediato para el Bicentenario.

La reunión se realizó en el Salón Blanco del Palacio de Gobierno. En la apertura de sobres, entre otros funcionarios porteños, estuvieron presentes Silvana Giudici (titular de la comisión Puertas del Bicentenario, con rango de ministro) y Lia María (ministra de Espacio Público). Según informaron autoridades del Ejecutivo de la Ciudad, el concurso tenía varios objetivos, como la recuperación de la calidad ambiental de la Plaza de Mayo (proyecto original de Carlos Thays, de 1891) en toda su significación y su puesta en valor, debido a su valor patrimonial y a que se trata del espacio cívico por excelencia de todos los porteños, para llegar a la celebración del Bicentenario de la Revolución de Mayo en su mejor expresión.

Luego de la presentación, la diputada lopezmurphista Marta Varela (Recrear) aseguró que "si la intención era promover el uso funcional de la Plaza de Mayo para el mejor aprovechamiento del espacio público, creo que no fue bien logrado. El proyecto ganador implica una pérdida de identidad y de funcionalidad para la Plaza y que se va a asemejar a una playa de estacionamiento con muchas luces".

El proyecto seleccionado fue elaborado por los arquitectos Silvia Colombo, Ignacio Montaldo y Roberto Szraiber, quienes tuvieron la colaboración de los arquitectos Lukas Gerber, María Sol Imaz y Gabriela Gotusso, más el asesoramiento en iluminación de la arquitecta Verónica La Cruz. Supuestamente, se basa en una concepción que, a modo de un pentagrama, se apoya en la geometría y en esa materialidad para dar soporte a elementos portadores de sentido".

Según los autores de la iniciativa "la plaza de Mayo no es una plaza, es un escenario cívico donde cada acontecimiento de la historia argentina quedó de algún modo grabado en sus pisos. Es el patio de la Ciudad, el centro de convocatoria social". Lo cierto es que el piso será íntegramente de granito gris y se colocarán infinidad de luces, reduciendo casi a su mínima expresión los espacios verdes que actualmente hay en la Plaza, como se puede apreciar en la fotografía. Es un estilo muy similar al que tiene la plaza La Défense de París.

Para Varela "la nueva Plaza de Mayo se parecerá más a una plaza de los regímenes totalitarios -donde los espacios se preparaban únicamente para la localización de los ejércitos- que al sitio en donde trascurrieron los hechos más importantes de nuestra historia".

Por otra parte, se decidió que es necesario revisar la peatonalización de dos cuadras de la Plaza, debido a un informe técnico elaborado por la Secretaría de Tránsito que dio cuenta de futuros embotellamientos debido a esta medida. Lo cierto es que las luces que se instalarán en la Plaza podrán ser disfrutadas por algunos privilegiados. Seguro desde la Jefatura de Gobierno y el balcón de la Casa Rosada se verán muy bien.

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