“Es una esperanza que Julián pueda llegar a la gobernación de la provincia de Buenos Aires”, dijo el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien de esta manera manifestó su posición con respecto a la compulsa por la gobernación bonaerense, pese a las críticas y reparos que mantiene sobre el gobierno nacional.
El encuentro entre Pérez Esquivel y el titular de la Cámara de Diputados se dio en el partido de San Martín, más precisamente durante una visita a la parroquia de Lourdes, en José León Suárez, y tuvo como testigos al padre Pepe Di Paola, al director de Enlace Parlasur, Camilo Vaca Narvaja, al intendente de La Matanza y compañero de Domínguez, Fernando Espinoza, y al gobernador bonaerense Daniel Scioli.
“Hay que recuperar esto que dice Julián de darles a los jóvenes espacios de participación, no como espectadores sino como protagonistas de su propia vida y constructores de su propia historia. Y creo que con políticas públicas y políticas sociales es posible”, apuntó Pérez Esquivel, hombre de fluido diálogo con el Papa Francisco, padrino de la carrera política de Domínguez desde sus albores en Chacabuco.
Este apoyo por parte del Nobel y Di Paola a Domínguez parecen dar entidad a los rumores que indican que el propio Francisco le habría pedido a la Presidenta que resguarde su candidatura bonaerense.