Dos nuevos citómetros de flujo se incorporaron a la red de atención de las personas que viven con HIV, que dirige a Coordinación de SIDA de la Secretaría de Salud del Gobierno de la Ciudad. Los nuevos equipos, que permiten medir el nivel de defensas del organismo a través de la cantidad de linfocitos CD4, se instalaron en el Hospital Fernández y en el Hospital Muñiz, que ya contaba con uno. El otro nosocomio que tiene esta tecnología es el Hospital Durand.
El recuento de linfocitos CD4 es de fundamental importancia para decidir diferentes conductas médicas en las personas que viven con HIV. Por ejemplo, a partir de estos equipos los médicos podrán iniciar un tratamiento antirretroviral, detectar precozmente cuándo deja de ser eficaz alguna droga -falla terapéutica- para definir un nuevo tratamiento, y decidir la suspensión de tratamientos de prevención de "enfermedades oportunistas" que aprovechan las defensas bajas de los pacientes.
Hasta el momento en la ciudad sólo se disponía de dos citómetros para cubrir la totalidad de los estudios de CD4 de los pacientes adultos. La incorporación de estos nuevos equipos no sólo facilitará el acceso de los pacientes al estudio -el Hospital Fernández es responsable de casi el 20 por ciento de los ocho mil pacientes porteños- sino que, ante cualquier desperfecto técnico, se garantiza la capacidad de respuesta del sistema.
Este nuevo avance contrasta con la no aprobación por parte de los legisladores de la Ley de SIDA, que hace más de un año que tiene despacho favorable de la Comisión de Salud de la Legislatura porteña y aún espera por su tratamiento en el recinto.