El jefe de Gabinete Aníbal Fernández confirmó este mediodía que 1.400 efectivos federales se están desplazando a la provincia de Buenos Aires para combatir el delito ligado a la venta de estupefacientes: “Yo no diría que es un envío (de policías), si no que es la decisión de trabajar mancomunadamente en la lucha contra el narcotráfico”, expresó ante los medios el candidato a gobernador del FpV.
“Supongo que será una política de complemento en lugares en los que se necesita reforzar”, agregó. Los efectivos –en principio, se trata de 700 efectivos– se desplegarán especialmente en los partidos de San Martín y Tres de Febrero, donde el narcotráfico golpea con más fuerza y donde, además, el kirchnerismo quiere retener las intendencias.
Tanto el municipio de San Martín como el de Tres de Febrero tienen instaladas desde hace décadas delegaciones de la Policía Federal y, ahora, con la nueva maniobra oficialista, se intenta acentuar la labor de dicha fuerza, en distritos en los que, justamente, proliferan las denuncias vinculadas al narcotráfico.
La medida del gobierno recuerda a una similar tomada en 2013 cuando se enviaron 4000 gendarmes a la provincia de Buenos Aires. Entonces, se anunció oficialmente que la decisión estaba orientada a “colaborar en el combate del delito” con la Policía Bonaerense.
