Para celebrar los 70 años del emblemático 17 de octubre de 1945 los jóvenes de la Juventud Peronista de la Ciudad de Buenos Aires organizaron un brindis en la sede porteña del Partido Justicialista para recibir en conjunto al dia de la lealtad.
Más de 300 jóvenes se reunieron, el día viernes por la noche, en la sede porteña del Partido Justicialista ubicada en San José 181. Allí elaboraron un documento en donde reconocen al 17 de octubre de 1945 como “el origen del movimiento” peronista.
En el documento se destacan los principales acontecimientos del movimiento a partir de la fecha, en particular el simbolismo de lo acontecido en aquella jornada que tuvo al pueblo como principal protagonista. “El día en que hicieron escuchar su voz con un solo nombre. El de su líder, Juan Domingo Perón”, señala la misiva recordando a “los descamisados” que ganaron las calles y le pusieron nombres a sus sueños y demandas insatisfechas.
Los jovenes peronistas de la Ciudad de Buenos Aires entienden que este día debe ser un punto de encuentro para continuar las políticas sociales que se han llevado a cabo en estos años, para desarrollar el futuro de la Argentina a partir del próximo 10 de diciembre. El mandato del pueblo arraigado en la doctrina del General Perón, será la guía para la victoria.
El cierre estuvo a cargo de Dante Sironi y Facundo Giampaolo quienes destacaron “el trabajo y la lucha de Nestor y Cristina Kirchner en la transformación de la Argentina a partir del 25 de mayo de 2003”. A su vez remarcaron el rol de Daniel Scioli como aquel que “continuará con las políticas y las conquistas de los últimos 12 años”.
De la actividad participaron todas las agrupaciones peronistas de la Ciudad de Buenos Aires mostrando una clara unidad de cara a los comicios del próximo 25 de octubre.
A continuación, el documento completo.
Han pasado 70 años de aquel 17 de octubre, el mayor acontecimiento político y social de la argentina del siglo XX protagonizado por el pueblo trabajador, el parteaguas donde los descamisados, los grasitas, los cabecitas negras ganaron la calle en avalancha y le pusieron nombre a sus esperanzas, a sus demandas insatisfechas, a sus sueños, el día en que hicieron escuchar su voz con un solo nombre. El de su líder. Ese nombre fue Juan Domingo Perón.
Ese fue el origen del movimiento que hoy conmemoramos. Un origen lleno de conquistas y derechos que se hicieron carne en nuestro pueblo, históricamente relegado por la oligarquía. Sería interminable enumerar los estatutos del peón, las jornadas laborales de 8 horas, los aguinaldos, las leyes de ancianidad, el voto femenino, la lucha de Evita por los más humildes como cada hito marcado a fuego en nuestra memoria. Fueron y son estas las banderas que guiaron a nuestro pueblo aún en las horas más oscuras de nuestra historia. Las que permitieron atravesar 18 años de bombardeos, proscripciones y fusilamientos para el reencuentro del 73. Las mismas banderas por las que entregaron la vida nuestros mártires.