Finalmente la Cámara de Diputados bonaerense aprobó el Presupuesto, tras no haberlo votado en el mes de diciembre a causa del reclamo de la bancada del Frente para la Victoria por el endeudamiento de 100 mil millones que había propuesto el gobierno que encabeza María Eugenia Vidal.
El otro reclamo que debió superar la administración provincial partió de los intendentes del FpV, que notaron que las partidas para para obras en sus distritos no estaban contempladas en la ley de leyes.
Las negociaciones fueron ríspidas y se desarrollaron a “cara de perro” y culminaron este jueves con la decisión de que, de los 60 mil millones en los se autorizó a endeudarse a la provincia de Buenos Aires, 10 mil serán destinados a obras a desarrollarse en los 135 municipios, pagaderas en tres cuotas, a efectivizar en abril, junio y agosto.
El total de erogaciones que cubrirá la provincia asciende a 354.244.282.441 pesos. De éstos, 180 mil millones estarán destinados a la administración central y 97 mil millones se los llevará la Dirección General de Cultura y Educación.
A pesar de que se había anunciado que el bloque del FpV estaba a punto de fracturarse, sus 35 integrantes votaron afirmativamente todos los artículos de la ley, excepto el que lleva el número 32, que no fue votado por el grupo de 15 legisladores ligado a La Cámpora, que consideró que el endeudamiento por 60 mil millones era excesivo. Ellos habían propuesto anteriormente que la suma no debía exceder los 50 mil millones.
El líder de esta fracción, José Ottavis, explicó que su voto negativo se debía a que “la deuda que Vidal pide tomar es un cheque en blanco”.
Por su parte, durante el debate, el diputado Marcelo Daletto (Cambiemos) destacó que “en esta provincia hay un fuerte déficit social y de infraestructura; y esa es la deuda que tiene el Estado con todos los bonaerenses”, para agregar que “estamos dispuestos a lograr los consensos para que la gente viva mejor”.
“La provincia tiene una necesidad de endeudamiento de 90 mil millones de pesos. Hoy sólo vamos a autorizar algo más de 50 mil millones, pero quiero dejar en claro la necesidad que tiene Buenos Aires de un endeudamiento mayor”, puntualizó el legislador oficialista.
María Valeria Arata, legisladora de UNA, afirmó por su cuenta que “nosotros acompañamos esta herramienta fundamental porque sabemos que la gente eligió un cambio” y sostuvo que “el presupuesto refleja la situación de esta provincia, que está quebrada, por lo que el endeudamiento es necesario y por eso acompañamos esta ley en todos sus términos”.
El dato político que acompañó la votación fue la masiva presencia de intendentes, entre los que se pudo ver a Gustavo Menéndez (Merlo), Juan Pablo De Jesús (La Costa), Francisco Echarren (Castelli), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Gabriel Katopodis (San Martín), Eduardo Bucca (Bolívar), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Juan Carlos Gasparini (Roque Pérez),Jorge Ferraresi (Avellaneda), Juan Patricio Mussi (Berazategui), Gustavo Arrieta (Cañuelas), Verónica Magario (La Matanza), Alfredo Fisher (Laprida), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Juan Zabaleta (Hurlingham), Walter Festa (Moreno), Santiago Maggiotti (Navarro), Fernando Gray (Esteban Echeverría) y Hugo Corvatta (Saavedra).
A ellos se sumó también el presidente del Partido Justicialista bonaerense, Fernando Espinoza, que fue uno de los jefes de Gobierno más influyentes de esta Liga de Intendentes cuando se desempeñaba como jefe municipal de La Matanza, uno de los distritos más populosos de la Provincia.