El Frente para la Victoria (FpV) pasa un momento crítico en el Parlamento nacional. El bloque de Diputados nacionales se partió y todo indica que la sangría continuará, Sin embargo, en el Senado se mantiene la unión. La explicación de eso tiene nombre y apellido: Miguel Ángel Pichetto, el jefe del bloque de senadores del FpV.
“La cintura política de Pichetto y su experiencia legislativa lograron lo que parecía imposible, que luego de la ruptura en Diputados la cosa se trasladara al Senado”, le dijo a Noticias Urbanas un asesor legislativo del peronismo en la Cámara Alta.
Gracias a Pichetto los 40 senadores de la bancada se mantienen unidos, a pesar de las diferencias.
“Contradicciones e internas hay. Existe la misma división que en Diputados entre K y peronistas, pero Pichetto sabe que para negociar con el macrismo y obtener buenos resultados para el bloque, deben estar unidos”, le señaló a este medio la fuente antes citada.
La bancada de Cambiemos es pequeña en relación al FpV, ya que juntando aliados oscila entre 8 y 10, a veces un poco más. Pero muy inferior a la que lidera Pichetto.
Por eso, están condenados a negociar con el Frente para la Victoria todas las leyes y ahí radica la fuerza de Pichetto y su poder de negociador.
“Cambiemos tiene que sentarse, quieran o no, con Pichetto para hacer avanzar sus proyectos. Y eso es porque el bloque está unido si se quiebre se pierde poder y Pichetto no va a dejar que eso suceda”, le dijo un radical a Noticias Urbanas.
De esa manera, Pichetto es tan importante para el Frente para la Victoria como para Cambiemos. Casi imprescindible.