La Semana Santa parece haber quedado lejos de los récords de consumo. Es que según un relevamiento de Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), unas 2.270.000 personas viajaron por el país entre el miércoles en la tarde y este domingo pero el consumo estuvo muy por debajo de los últimos años.
La cantidad de turistas que viajaron por semana santa fue un 2,1 por ciento superior al 2015 pero en relación al año anterior el gasto cayó un 4,8 por ciento en el fin de semana largo. El promedio del viaje de los turistas fue de 3,3 días cuando la permanencia venía alcanzando el 3,8 en años anteriores.
La particularidad es que el gasto diario per cápita fue de 540 pesos, es decir un 18,7 por ciento más que el año pasado. Esto demuestra que con inflación anual que superó ese nivel, el gasto cotidiano reflejó cómo con menor poder adquisitivo, la gente sigue viajando pero ajusta diferentes puntos para abaratar el fin de semana.
Los datos fueron relevados en 40 puntos turísticos del país y quedó reflejado que el turista promedio cuidó sus consumos, y cuando fue necesario, resignó calidad para aprovechar las ofertas de alojamiento, gastronomía y servicios recreativos que ofrecieron muchos empresarios para captar público.
