La polémica designación de Gils Carbó a la Procuración general por sus vínculos con el kircnerismo podría encontrar limitaciones con las nuevas medidas que pretende imponer el ministro de Justicia macrista, Germán Garavano. El mismo se encuentra desde este mediodía en la Cámara Baja defendiendo el proyecto para reformar la Ley Orgánica del Ministerio Público Fiscal
La idea del proyecto es recortar a cuatro años el mandato del procurador –hoy el cargo es vitalicio- y facilita el proceso de juicio político para su remoción.
Además, se crea la figura de cuatro subprocuradores generales en derecho penal, en delito organizado, en derecho público y en derecho privado.
Asimismo, la propuesta de ley también prevé una participación más activa del Consejo General del Ministerio Público Fiscal.