Se cumple este lunes un mes de la fiesta electrónica Time Warp que dejó un saldo de cinco jóvenes muertos por consumo de drogas de diseño. Luego de treinta días, entonces, el fiscal federal Federico Delgado pidió que se procese con prisión preventiva a Stinfale y los demás acusados de haber organizado la fiesta: Adrián Conci, Maximiliano Avila, Carlos Garat y Martín Gontad.
Stinfale ya cuenta con prisión domiciliaria desde el jueves pasado según lo que ordenó el juez Casanello. No obstante, para Delgado la domiciliaria aumenta los “riesgos procesales y de entorpecimiento” de la investigación.
Los delitos por los que se acusa a los organizadores de la fiesta son facilitación de lugar para vender drogas y abandono de persona seguido de muerte. Para el fiscal, además, ya se probó la relación entre las drogas y la venta de agua para garantizar la hidratación.
El fiscal sostuvo también que los organizadores “diseñaron e implementaron la reunión” y por eso tenían la “responsabilidad formal y funcional”. “En efecto, la organización de la “Time Warp” no fue obra de una empresa asociada a otras. Fue obra de un conglomerado empresario que tiene múltiples rostros”, agregó el fiscal.