En momentos en que Mauricio Macri cumple seis meses en la Casa Rosada, Horacio Rodríguez Larreta pelea para dejar su impronta en un distrito que su jefe político gobernó durante ocho años.
“Horacio no está escondido”, replica la legisladora Victoria Roldán Méndez. Su hipótesis es que como el macrismo administra los tres principales distritos, la atención está más puesta en la gestión que en la discusión política.
Titular de la Comisión de Salud en la Legislatura, Roldán Méndez defiende ante Noticias Urbanas la responsabilidad del Gobierno porteño en, quizás, la primera crisis de Larreta al frente del Ejecutivo: la tragedia de la fiesta electrónica Time Warp. “Hay que dejar investigar a la Justicia”, afirma, horas después de que cinco funcionarios de la Ciudad fueran procesados por el juez Sebastián Casanello.
Como vocal dentro de la estructura partidaria, la diputada de Pro también admite los cambios internos en la Legislatura. Incluso se aventura en pronosticar que para las próximas elecciones ya podría darse en la Ciudad una interna de Cambiemos entre el macrismo, el radicalismo y la Coalición Cívica-ARI (CC).
–Esta semana, la Justicia avanzó contra funcionarios por la tragedia en la fiesta Time Warp. ¿Qué responsabilidad le cabe a la Ciudad?
–El tema de la fiesta lo está investigando la Justicia, que tiene plena independencia para avanzar en caso de que haya habido alguna irregularidad por parte de alguna persona particular.
–Larreta se mostró un poco molesto. ¿La tragedia fue su primera crisis?
–Desde lo de Time Warp, el tema sobre las drogas, que no es nuevo, se puso sobre la mesa. Desde el Gobierno de la Ciudad hubo una gran voluntad para debatir estas cuestiones y ya impulsamos dos mesas con distintos referentes, especialistas y funcionarios. La conclusión obvia es que el tema es complejo, pero el objetivo de la mesa es que dentro de un mes haya un documento con ciertos lineamientos de acción para actualizar las herramientas que tiene la Ciudad al respecto.
–¿La Ciudad ha hecho poco en los últimos años para atacar las drogas?
–Una cosa es atacar el narcotráfico, que es un delito federal, y otra es hacer campaña de concientización. En eso trabaja la Ciudad y buscamos que haya una campaña para poder darles asistencia a los que lo necesiten y tengan problemas de adicción. No estamos analizando desde la parte normativa o penal, sino que apuntamos a la reducción del riesgo.
–¿El gran desafío será para Macri, entonces, ya que prometió en campaña luchar contra el narcotráfico?
–La voluntad existe y es muy fuerte. No vamos a ver los resultados en tres o seis meses. La cuestión es a largo plazo porque durante muchos años se dejó crecer el narcotráfico en la Argentina.
–Larreta ya lleva seis meses como sucesor de Macri. ¿En qué cambió la forma de gobernar?
–Personalmente, a Horacio lo veo muy entusiasmado con todos los proyectos que hay. Más allá de que Mauricio sea presidente, hay lineamientos que siguen. Tenemos la misma forma de gestionar el gobierno y de enfocar la política. Pero también sabemos que hay gente que se está adaptando porque asumieron nuevos puestos o cosas en las que hay que mejorar.
–¿Larreta es más silencioso, o la atención mediática está toda puesta en Macri?
–Yo creo que antes pasaba que como Mauricio era el líder de Pro y Cristina [Kirchner] era la presidenta, la diferencia entre cada parte se sentía más. Hoy no hay esa discusión porque ahora las jurisdicciones son del mismo equipo. Las noticias tienen más que ver con gestión que con la contraposición de ideas. Horacio no está escondido.
–En la Legislatura y en el bloque también hubo cambios de liderazgo. Ya no conduce Ritondo sino que están Polledo y Quintana.
–Carmen tiene un estilo propio muy personal. Y Francisco lo mismo. Estamos trabajando muy bien, aunque entendemos que es un bloque donde cada uno tiene distintos orígenes.
–¿Cómo convive el Pro con el radicalismo y la CC, que a nivel nacional son aliados?
–No está tan clara esa alianza en la Legislatura. No hay un bloque de Cambiemos, aunque estamos trabajando un poco en la integración. Estamos pensando en un bloque más grande donde podamos confluir. Pero en algunos temas tenemos sintonía y concordancia y en otros no. El Pro no tiene mayoría así que todo sale de consenso.
–¿Podría haber una interna de Cambiemos porteño en las próximas elecciones?
–Creo que todo podría encaminarse hacia eso, pero aún falta un año, y en la política un año es mucho tiempo.
–Antes hablamos de la tragedia en Time Warp. El kirchnerismo fue muy crítico de Larreta.
–Yo soy muy respetuosa de las opiniones de los otros bloques, pero el kirchnerismo es un bloque duro. Son más combativos. Yo creo que no esperaban esa derrota en las elecciones y tenían otra visión de cómo iban a salir.
–Macri prometió acabar con la pobreza, pero en estos meses hubo aumento de precios y de tarifas y deterioro social. ¿Qué tan cierta es la promesa de que en el segundo semestre la situación va a mejorar?
–La situación económica que hemos heredado no es fácil. Si Mauricio hubiera tenido otra opción contra la inflación y los problemas macroeconómicos, hubiera tomado otras decisiones. Su grandeza no está en hacer algo que genere mejoras hoy pero dolores de cabeza mañana. Hay que entender que a la Argentina no se la puede ver más con visión cortoplacista. En los últimos años se hicieron parches en la economía. Van a seguir siendo meses difíciles, pero apostamos a que se mejore paulatinamente y a largo plazo
