“El programa establecido por la ley 341 tiene que ser una producción colectiva entre los cooperativistas y el IVC”, señaló Pablo Roviralta, Presidente del Instituto de Vivienda de la Ciudad, al abrir el desayuno de trabajo al cual asistieron más de 70 titulares de créditos hipotecarios del programa Viviendas Cooperativas. El encuentro se realizó por la mañana del miércoles en el Centro Metropolitano de Diseño en Barracas.
Durante la reunión, en el cual las autoridades del IVC escucharon las diferentes posturas de los asistentes sobre el presente y el futuro del programa, se acordó continuar trabajando en forma conjunta para mejorarlo.
El Programa Viviendas Cooperativas, creado a través de la ley 341 y sus modificatorias, se basa en el otorgamiento de créditos a hogares de escasos recursos y en situación crítica habitacional, conformados en organizaciones colectivas con personería jurídica (Cooperativas, Asociaciones Civiles, Mutuales, etc.) para compra y/o construcción de viviendas.
Su misión es acompañar a las organizaciones sociales en la concreción de sus proyectos de vivienda. Las mismas se constituyen en cooperativas de vivienda y, de acuerdo a sus posibilidades, pueden, a su vez, conformar cooperativas de trabajo capaces de dar solución a sus problemas habitacionales.
Este programa ha implicado una modalidad novedosa de intervención: el IVC opera como ente asesor financiero y fiscalizador de procesos que conducen y ejecutan los propios beneficiarios, quienes asumen compromisos que comprenden – entre otras tareas- relevamientos de demandas, trámites administrativos, contratación de profesionales y búsqueda y elección de inmuebles destinados a la realización de las obras.
Cada organización es acompañada por el IVC en la selección y puesta en funciones de un equipo interdisciplinario que cubre las cuatro áreas del proceso, es decir, construcción, social, administrativo- contable y legal.