La ley de Ejecución Penal vuelve a ser cuestionada por ser la responsable que gran parte de los condenados por el incendio del boliche de Once pudieran quedar en libertad.
Es que a los familiares de los 194 fallecidos que dejó el siniestro sucedido en diciembre del 2004 no les consta como justificativo la intención de la ley de proveerles a los condenados medidas de “humanización”, por lo que a través de talleres de diferentes modalidades pueden recortar su sentencia hasta veinte meses.
Esta ley propone cursos de formación profesional y educativa que están enmarcados en la ley de Ejecución Penal a fin de generar actividades que ayuden a una “adecuada reinserción social” antes del cumplimiento del tiempo total de la condena.
Tal es el caso de la ex subsecretaria de Control Comunal, Fabiana Fiszbin, que de los cuatro años de prisión que indicaba su sentencia, pasó sólo un mes y 17 días tras las rejas en el penal de Ezeiza. Esto es por haber realizado talleres de guitarra, canto, muñequería, marroquinería, programador de sistemas, reparador y operador de PC y Word para oficinas.
Asimismo, algunos otros condenados podrían ser liberados en los próximos meses; como Raúl Villarreal, exmano derecha de Omar Chabán, que también participó de varios talleres, por lo que podría conseguir la habilitación de salidas transitorias a partir de octubre.
En cuanto a Gustavo Torres, el exdirector general de Fiscalización y Control de la Ciudad y los ex Callejeros Christian Torrejón, Elio Delgado y Juan Carbone se encuentran a la espera de una respuesta a su solicitud de reducción de pena por haberse sumado a estos programas.
Y, por el momento, Patricio Fontanet deberá esperar. Él, por haber estado en tratamiento psiquiátrico, no pudo inscribirse a ningún curso o taller, pero en la actualidad ya se encuentra en proceso.
“Lamentablemente vamos a ir viendo cómo salen en libertad los homicidas”, expuso Nilda Gómez, madre de Mariano, fallecido durante la tragedia. “Es necesario trabajar en las leyes para que dejen de ser tan garantistas”, concluyó.