Los coletazos políticos que trajo la fractura del bloque del Frente para la Victoria (FpV) están lejos de aquietarse. En la sesión del último jueves se presentó el flamante Bloque Peronista y, además, María Rosa Muiños oficializó su renuncia a la Vicepresidencia segunda de la Legislatura.
Esto desató una interna para ocupar ese codiciado lugar. En principio y, según el reglamento interno, ese lugar le corresponde al Frente para la Victoria, ya que es la segunda fuerza después del Pro. Demás está decir que desde el oficialismo no desean que alguien de La Cámpora acceda a dicho lugar.
A pesar de que perdió cuatro legisladores, el FpV mantiene la supremacía sobre Suma+. Tiene 9 frente a los 6 del espacio de Martín Lousteau.
Pero en la Legislatura, las cuestiones políticas no se resuelven utilizando la matemática. El dilema de la vicepresidencia segunda tiene varias aristas. En primer lugar el Pro no está convencido de entregarle ese lugar a La Cámpora, ya que con la fractura del FpV, el bloque mayoritario pasó a ser controlado por ese sector.
En este punto entra en escena el legislador Gabriel Fuks. Cuando se produjo la ruptura de la bancada, el diputado porteño analizó seriamente la posibilidad de formar un monobloque. Si esto se daba, el FpV pasaba a tener ocho legisladores, con lo cual retener la vicepresidencia segunda se le hubiera complicado muchísimo. El motivo era claro y sencillo: si los dos legisladores socialistas se sumaban a Suma+ llegaban también a ocho. Esto sin contar la posibilidad de que también se agregara el legislador del Partido Socialista Auténtico (PSA).
Según pudo saber Noticias Urbanas, en el bloque del FpV hubo reuniones en donde se debatió “muy seriamente” la posibilidad de que Fuks ocupara la Vicepresidencia segunda, con el objetivo de retenerlo y conservar el número que les permitiría no poner en juego ese lugar con Suma+ y el socialismo. “También se barajó la posibilidad de que fuera Carlos Tomada quien ocupe ese rol, pero para eso debería dejar la jefatura del bloque -ya que nunca pasó en la Legislatura que alguien ostente los dos cargos-, y, por otra parte, Tomada está muy relacionado con La Cámpora y el Pro prefiere otro candidato. Por eso, el nombre de Fuks los convence más”, manifestó un importante asesor legislativo, quien añadió que “por sus posturas, Fuks no podría ser nunca jefe de ese bloque si Tomada fuera vicepresidente segundo del cuerpo, pero quizás a la inversa, sí funcionaría el asunto”.
Otro que podría ocupar la Vicepresidencia segunda es el actual vicepresidente tercero de la Legislatura y jefe del bloque del Partido Socialista (PS), Roy Cortina, quien desea llegar a ese lugar.
Para lograr su objetivo, Cortina debe reflotar el interbloque de ECO, que nunca llegó a funcionar como tal en la Legislatura. Un dato a tener en cuenta: cuando asumieron los nuevos legisladores, el 10 de diciembre del año pasado, el interbloque de ECO llegaba a 14 legisladores y el FpV tenía 13. Si Roy logra que Suma+, el Socialismo, el Socialismo Auténtico y Confianza Pública lo apoyen, obtendría sin problemas la Vicepresidencia segunda.
Sin embargo, algunos sostienen que ECO no estaría dispuesto a emprender la batalla contra el FpV este año, pero sí el año que viene. Aunque Cortina prefiere adelantar los tiempos e ir por todo ahora.
