El anuncio oficial se realizará el martes. Ese día, el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, dará a conocer el nombre de la nueva policía de la Ciudad, el escudo, el color de los uniformes y los patrulleros y además dará detalles sobre su escalafón.
Una importante fuente del oficialismo, le dijo a Noticias Urbanas, que la nueva fuerza de seguridad nacerá de la unión de los efectivos de la Superintendencia de Seguridad Metropolitana de la Policía Federal (PFA) y de la totalidad de los integrantes de la Policía Metropolitana (PM).
Se calcula que la nueva institución tendrá alrededor de 25 mil efectivos, que resultan de la suma de los algo más de 18 mil que integran Seguridad Metropolita, con las 54 comisarías de la Capital Federal y los más de seis mil integrantes de la PM.
“Nuestra idea será trabajar en una policía especializada sobre tres ejes: inteligencia, tecnología y armamento. Para eso, hay un equipo trabajando en una policía con objetivos a largo plazo”, agregó el funcionario consultado.
Además, ya se elaboraron más de 32 proyectos que hacen foco en esos tres ejes. Los funcionarios encargados de llevar adelante el proyecto de la nueva policía porteña viajaron a distintos países para estudiar el manejo de la seguridad en las grandes ciudades.
Entre otras, se analizó y evaluó el trabajo de las fuerzas de seguridad de ciudades como Nueva York, Londres, Berlín, Munich y Tel Aviv.
La nueva fuerza no solo hará hincapié en la inteligencia y la tecnología, sino que también tendrá una mayor presencia en los barrios de la Ciudad.
Gran parte del nuevo armamento ya fue adquirido, al igual que los modernos chalecos antibala.
El anuncio de la nueva policía se enfrenta a un problema importante: la oposición de buena parte de los federales incluidos en el traspaso. Este dato no es menor, ya que para evitar los alrededor de cinco mil juicios que podrían iniciarse contra el Gobierno porteño, debido a que cualquiera de los traspasados tienen la posibilidad de iniciar acciones legales tras el cambio de su estatus policial. Por eso, Larreta está obligado modificar la Ley de Seguridad Pública.
A partir de este escenario, el rol de la Legislatura será fundamental, ya que deberá aprobar una nueva ley de Seguridad que le dé cobertura y marco legal al traspaso. Esa es la única manera de evitar futuros juicios.
La ley que envíe Larreta a La Legislatura deberá salir por consenso y, para eso, el Pro se verá obligado a establecer alianzas con varios sectores de la oposición. Este tipo de leyes necesita 40 votos para su aprobación.
El último dato a tener en cuenta es el papel que jugará la Comisión de Seguimiento de la Seguridad Pública de la Legislatura, que preside el oficialismo.
El Gobierno de Larreta quiere enviar a la Legislatura, lo antes posible, el proyecto de la nueva Ley de Seguridad Pública. Según las fuentes consultadas por NU, el envío se haría días después del anuncio que se realizará el martes.
La suerte de la nueva policía dependerá de lo que haga la Legislatura. Horacio Rodríguez Larreta lo sabe mejor que nadie.