La inseguridad es el problema más grande de los argentinos, según una encuesta de Gustavo Córdoba y Asociados, en base a 1200 encuestas domiciliarias hechas a personas mayores de 16 años, en las principales ciudades del país. La misma firma realizó una medición similar hace dos meses y en ella el 24 por ciento de la gente, a comparación del 32 por ciento actual, consideraba su mayor problema la corrupción.
Aún resonaban las detenciones de Lázaro Báez y José López, porque el 17.8 de los consultados continúa pensando que su problema más importante es la corrupción. Muy cerca le sigue la educación (16.9) y la pobreza (15.4) y, más atrás, el desempleo (11.7).
Respecto a la inflación, solo un 6.8 la sigue teniendo como su principal conflicto, un 9 por ciento menos que hace dos meses.
Ahora bien, un 54 por ciento aprueba la gestión de Mauricio Macri y un 45 la rechaza. Entre los que lo respaldan, hay un 80 por ciento que lo votaron en noviembre y un 20 que ese día optó por Daniel Scioli.
María Eugenia Vidal continúa, además, siendo la dirigente de mejor imagen: con un 42 por ciento de muy buena y un 19.3 de buena. La negativa llega a 30 (17.5 muy mala y 11.9 mala).
En una etapa favorable para políticas mujeres, le sigue Margarita Stolbizer (31.3 muy buena y 24.2 buena) y Elisa Carrió (33.2 y 20.5 por ciento).
Randazzo, por otro lado, casi comparte la imagen positiva con Massa, pero el ex ministro tiene menor imagen negativa (39 por ciento), que sigue siendo el mayor punto débil de Cristina Kirchner, con un 38.6 de positiva y un rechazo de 57.4, cifra que la aleja de los posibles candidatos presidenciales.
Los encuestados no tuvieron una buena evaluación del gobierno de Macri: un 52.5 por ciento consideró que el Gobierno hizo menos de lo que esperaba, entre ellos un 44.3 que lo votó en el ballotage.
Y hay consenso mayoritario en que la velocidad de resolución de los problemas no es la esperada: un 34.5 por ciento cree que el gobierno avanza muy lento y un 39.6 que lo hace lento.
Y más de lo mitad dice que Macri no sabe cómo resolver sus principales objetivos: pobreza cero, unir a los argentinos y pelear contra el narcotráfico. De todos modos, un 32 por ciento sostiene que debe ser reelecto y solo un 48.9 lo rechaza.