El Registro Unificado de Víctimas del Terrorismo de Estado (Ruvte), que depende del Ministerio de Justicia, precisó que durante la última dictadura militar hubo al menos 6.348 víctimas de desaparición forzada. Y referentes de derechos humanos, como Estela de Carlotto, salieron al cruce para expresar su enorme disgusto: “Ese informe nos humilla”.
La crítica de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo motivó la reacción de Claudio Avruj: el secretario de Derechos Humanos de la Nación se comunicó personalmente con ella para hacerle saber su desacuerdo con la acusación y explicarle que el número de desaparecidos surge de un relevamiento realizado por el gobierno de Cristina Kirchner.
Y agregó: “Es una cifra emblemática que hay que respetar porque se trata de un tema muy doloroso. Pero los datos oficiales, tanto de la Conadep como estos, ya figuraban con la administración anterior y ayudan a construir la historia. Por eso repito: lo de las 6.348 víctimas no es un número definitivo”.