El juez federal, Claudio Bonadio, argumentó su decisión de procesar a la expresidenta, Cristina Kirchner, en el marco de la causa dólar futuro al señalar que “quedó claramente configurado un delito de administración fraudulenta por abuso de confianza”, aunque descartó la posibilidad de ordenar su detención: “Hoy, procesalmente no están dadas las cuestiones que hacen a una posible orden restrictivas de la libertad”.
Bonadio explicó que en su fallo queda asentado “cuando el abuso es cometido en el momento en que el dólar futuro es ofrecido a un precio que no es de mercado, independiente a cómo termina el negocio”.
En este sentido, agregó: “El perjuicio económico no tiene nada que ver con el abuso jurídico con que el administrador usó los bienes que no eran propios; el tipo penal se configura cuando el Banco Central ofrecía el dólar futuro a un precio que se sabía que el mercado no iba a sostener”.
En relación a las críticas que recibió luego de ordenar el procesamiento, el magistrado pidió que “lean el fallo de cámara y hagan un mea culpa: quedó claramente configurado un delito de administración fraudulenta por abuso de confianza, no lo digo yo, lo dicen dos camaristas”.
Para Bonadio, la investigación por las operaciones de dólar futuro “es una de las causas de corrupción más importantes que hay, que nos costó a los argentinos la friolera de más de 57 mil millones de pesos; al dólar como estaba en ese momento, son 5 mil millones de dólares”.
“La operación de dólar futuro como una especulación fabulosa que se estaba generando la sabía todo el mercado financiero argentino. Se pudo reconstruir que había una decisión de posicionar en futuro como una forma de cubrirse de la inflación. No fueron sólo los banqueros, fue gran parte del sistema económico”, detalló el juez federal.
En relación a las personas que se beneficiaron con estas operaciones, además de la responsabilidad que asumió la exjefa de Estado, aseguró que “está la lista completa de quienes accedieron”, algo que remitió a “la AFIP a los efectos que se determine si las personas estaban en condiciones impositivas de hacerlo”.
Por último, se expresó sobre las amenazas del líder de la agrupación Quebracho, Fernando Esteche, quién aseguró que si Kirchner va presa, un juez “podría aparecer muerto”: “Cada uno es dueño de sus silencios y esclavo de sus palabras; yo sé lo que tengo que hacer, somos todos gente grande, haré lo que tengo que hacer y los demás que hagan lo que crean que tienen que hacer, y después que cada uno afronte las consecuencias”.