El titular del Movimiento Evita, Emilio Pérsico, que hace pocos días culminó una muy criticada negociación con el Gobierno, en la que consiguió un bono de fin de año de ocho mil pesos para los postergados sectores que representa, aludió a que los funcionarios intentan entregar paliativos ante sus reclamos para tranquilizar a los dirigentes sociales.
El dirigente graficó su afirmación afirmando que ante los requerimientos, desde el Poder Ejecutivo intentan poner paños fríos a la situación colocándoles una “barra de hielo en la cabeza”, complementada con un comprimido del emblemático ansiolítico “Lexotanil”, que tantas mentes calenturientas calmó, para que la inmovilidad persista.
En cuanto a sus tramitaciones para mejorar la situación de su gente, que le valió que el gobierno se comprometa a desembolsar la suma de 30 mil millones en tres años, Pérsico aceptó que “se lograron recursos para regar la pradera, para que la pradera no esté seca y para que tratemos de pasar las Fiestas lo mejor posible”.
Interrogado acerca de los fondos conseguidos en las duras negociaciones con el poder central, el piquetero debió negar que existan incompatibilidades. “¿Una caja millonaria?”, respondió con ironía, agregando que “ninguna caja es del Gobierno. Las obras sociales son de los trabajadores. Surgen de recursos de los trabajadores. Acá no hay plata del Gobierno, no hay ningún financiamiento del Gobierno. Al contrario -acotó-, el Gobierno, el Estado, te descuenta el diez por ciento; es un aporte que uno tiene que hacer”.
El exsecretario de Agricultura Familiar destacó que “no hay ninguna negociación con el Gobierno -refiriéndose a la obra social que está armando el Movimiento Evita-, ejercemos un derecho que tenemos como trabajadores de la economía popular“.
“La obra social que tenemos ahora es de la CTEP, pero queremos la nuestra, formada con nuestros aportes de 400 pesos cada uno“, explicó el dirigente, agregando que “hay que hacerlo con mucho acompañamiento. Hay 40 mil compañeros que reciben salud”, recordó, por si alguien lo hubiera olvidado.
Con respecto a la relación con el Gobierno, aceptó que “tiene diálogo, hay que reconocerlo”, a la vez que reconoció que “hay que decir que se han logrado en estas negociaciones de fin de año algunos recursos importantes. Por ejemplo, un aguinaldo que va a los planes sociales de 2.000 pesos. Una suba del 47 por ciento en los planes sociales”.
Este martes, en una sesión de la cámara baja, se estaría consiguiendo la media sanción de la Ley de Emergencia Social, por la que se instituiría el fondo de 30 mil millones aludido anteriormente.
