Las ventas minoristas iniciaron 2017 en baja: las cantidades vendidas por los comercios minoristas durante la semana de Reyes cayeron 3,1 por ciento respecto de la misma fecha del 2016. Los negocios apelaron a ofertas y liquidaciones para exprimir al máximo la época del año donde las ventas suelen subir radicalmente debido a las fiestas.
Sucede que, según indica la CAME, diciembre presentó una descendencia de la ventas minoristas del 5, 4 por ciento, mientras que para Navidad esta baja osciló en un 2,1 por ciento. Por esto mismo, la última esperanza radicaba en la semana de los Reyes magos, que al parecer optaron este año por juguetes y rodados, ya que fueron los únicos rubros que presentaron un mantenimiento o suba respecto de las ventas del pasado año. Sin embargo, los Gaspar, Melchor y Baltazar no lograron alcanzar buenos porcentajes: la caída de las ventas para esta fecha fue de 3,1 por ciento.
Sin embargo, las bajas fueron menos acentuadas de lo que se venía registrando a lo largo del 2016, lo que otorga cierta expectativa entre los empresarios de que el piso de la caída puede que esté más cerca.
Como ya sucedió el año pasado, los consumidores buscaron con anticipación los regalos para conseguir precios más convenientes, cuidar sus gastos y evitar la aglomeración de gente que suele darse sobre la fecha. De todos modos, como es habitual, la mayor parte de las ventas se realizaron entre el miércoles 4 y el jueves 5 de enero.
Según un relevamiento realizado por la consultora Focus Market para CAME sobre 2105 casos, los juguetes y la indumentaria lideraron las preferencias del público, seguidos por videojuegos, rodados y artículos deportivos.
El ticket promedio este año rondó los $340, un 28,3% por encima del año anterior ($265). Frente a las mayores dificultades de ingresos, las familias eligieron regalos más pequeños que en otras oportunidades.
La mayor parte de las ventas se realizaron con tarjetas de crédito y en cuotas. Las posibilidades de pagar en hasta 12 cuotas sin interés, que ofrecieron la mayoría de los comercios del país, ayudó a movilizar la venta de productos de mayor valor, especialmente rodados y consolas, que de otra manera hubiera sido más difícil. Sin embargo, para productos más chicos, los consumidores se inclinaron a plazos más cortos.
Las siguientes fueron las principales variaciones en las cantidades vendidas durante la semana de Reyes frente a la misma fecha de 2016, relevadas en 1000 comercios del país: