Por eso, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, remarcó que las medidas respetan “profundamente la Constitución” y explicó que se “aceleran los trámites para expulsar a los delincuentes que ya ingresaron”.
El funcionario nacional defendió la política gubernamental señalando que se busca “evitar que ingresen delincuentes a la Argentina”, aunque “muchas veces nos vamos de mambo y el país terminó aceptando hombres de bien y de no tan bien, delincuentes”.
“Lo que estamos haciendo con estas medidas es evitar que ingresen delincuentes a la Argentina y acelerar los trámites para que rápidamente podamos expulsar a los delincuentes que ya ingresaron”, explicó Frigerio.
“Somos un país que se forjó a través de inmigrantes. La Constitución dice que les tenemos que abrir las puertas a todos los hombres de bien que quieran habitar suelo argentino, y respetamos profundamente la historia y la Constitución”, agregó el ministro.
Por último señaló: “Hay argentinos que manejan la droga y la delincuencia, y hay extranjeros, esos que dejamos pasar por no tener controles, que también lo hacen. Esas personas sentían que la Argentina era una tierra fértil para delinquir”.