Si bien, el concepto de Ciudades Inteligentes existe hace varios años, la realidad es que aún podemos encontrar pocos casos en el mundo que hayan logrado materializar todos los beneficios que estas prometían.
Ahora, su importancia mantiene vigencia y cada vez se vuelve más relevante, frente a la tendencia creciente del desplazamiento de la población a centros urbanos. Se estima que actualmente +50% de la población viven en Ciudades, y para el 2050 se espera que la concentración alcance el 66% a nivel mundial. En ´90 existían 10 mega-ciudades (+10M hab), en 2014 pasaron a 28, y para el 2030 se espera que existan 41 (*)
En tal sentido, lograr una Urbanización sustentable que preserve la Calidad de Vida de sus Ciudadanos, es clave para alcanzar un Crecimiento y desarrollo exitoso. Así las Ciudades Inteligentes se volvieron la promesa que respondería a los desafíos,que representa la sobrepoblación de las mismas.
Ahora, para lograr convertir una Ciudad en una Ciudad Inteligente, se requiere trabajar en diferentes áreas: replantear la organización y administración de sus entidades de gestión, replantear y rediseñar sus Servicios públicos, su infraestructura de transporte, de energía, de salud, de seguridad, de alojamiento, cuidado del medio ambiente, el desarrollo de la actividad económica, entre otras.
Estos cambios desarrollados en múltiples áreas requieren al mismo tiempo desarrollar nuevos hábitos en los Ciudadanos, que no solo vivirán la ciudad de una forma diferente, sino que además cobran cada vez mayor protagonismo, volviéndose una parte activa de su gestión. Un ejemplo de esto es el “Presupuesto participativo”, que ya se aplica en algunas ciudades de Europa, que es parte del presupuesto de la Ciudad y se distribuye en función de la consulta e interacción directa con el Ciudadano, por medios digitales.
Es por eso que volverse una Ciudad Inteligente, es un proyecto de varios años, que requerirá múltiples ciclos de diferentes gestiones de gobierno. Lo cual implica la necesidad de definir un Plan integral, en el cual acuerden y ejecuten sostenidamente cada gestión.
Sin importar el área donde se planifique la transformación, vamos a encontrar un denominador común, y es la incorporación de tecnología, tanto de hardware como de Software, la tecnología informática y de comunicaciones se ha vuelto clave para alcanzar las transformaciones necesarias en una Ciudad Inteligente.
A continuación hago referencia a algunas tecnologías que además de ser innovadoras, y contribuir en la transformación de una Ciudad Inteligente, serían de potencial aplicación para resolver problemas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la ciudad de mayor tamaño que tenemos en Argentina.
– BigData con datos anónimos de Operadores Móviles: para monitorear y analizar la presencia y desplazamiento de la población. Esto permite desarrollar soluciones que por ejemplo permitan monitorear multitudes en cualquier lugar donde exista cobertura celular, Ej: presencia de cantidad de personas en eventos (fiestas electrónicas / eventos deportivos) y alertar si se supera la capacidad autorizada, y esto se puede realizar en tiempo real, sin instalar ninguna tecnología en el lugar del evento. Esta misma información se puede utilizar para planificación de transporte, etc.
– Monitoreo de presencia vehicular: sirve para retroalimentar el sistema de señalización de los semáforos, permitiendo que funcione no solo con la planificación de tiempos, sino con información en tiempo real del flujo vehicular, haciendo más eficiente la circulación del tránsito en las ciudades.
– Monitoreo de bicicletas: permite conocer el comportamiento de desplazamientos de personas en bicicleta en la Ciudad, ayudando en la planificación de bicisendas, midiendo el uso de las existentes, identificando la necesidad de nuevas, así como la evolución del uso de este medio de transporte.