Ante la gran cantidad de pintadas que afloran en las paredes de la Ciudad de Buenos Aires antes, durante y después de las campañas electorales, el Gobierno de la Ciudad manifestó la firme decisión de iniciar una campaña de paredes limpias, en la que informará a la opinión pública acerca de quiénes son los responsables de pintar leyendas políticas en los lugares no permitidos.
La secretaría encargada de llevar adelante esta tarea será la de Logística y Emergencias porteña. Su titular, Lía María, informó que "en los próximos días comenzarán a blanquear pintadas realizadas por algunos partidos políticos y candidatos, que representan para el ciudadano un gasto innecesario en los tiempos de crisis como los que atravesamos".
Estas acciones de blanqueo de paredes se llevarán a cabo a través de la Dirección General Guardia de Auxilio y la Dirección de Infraestructura y Renovación de Edificios. Personal de Logística y Emergencias utilizará hidrolavadoras para limpiar las pintadas que se acumulan en las paredes en los tiempos de campaña. Además se utilizarán máquinas que tiran pintura blanca para restaurar las paredes con leyendas.
Según la funcionaria, "en principio, el Gobierno porteño intenta instar a los partidos a respetar el espacio público y el patrimonio de la Ciudad, para no ensuciarla en forma desmedida ni generar una excesiva contaminación visual".
Según estadísticas de la Subsecretaría, deberán blanquearse más de 560 metros cuadrados de paredes a un costo estimado de entre 7 y 10 pesos por pared. Además se llevó a cabo un relevamiento de las pintadas realizadas hasta el momento, donde se señalan, por ejemplo, la ubicada en Reconquista 773, con la leyenda "De La Sota presidente", la que se encuentra en Avenida Córdoba al 5400, con la frase "Kirchner Presidente", y otras paredes que exiben los nombres de Adolfo Rodríguez Saá y Carlos Menem como futuros primeros mandatarios de nuestro país.
"Queremos transmitir la idea de que no se puede hacer campaña a costa de ensuciar la Ciudad y del dinero de la gente. Una campaña se hace sólo 60 días antes de las elecciones y dado que no tenemos instrumentos legales para impedirlo, apelamos a la sanción moral informando semana tras semana quiénes son los responsables de las pintadas", manifestó Lía María.
