Los objetivos son alentadores: facilitar las interconsultas, identificar a los pacientes, evitarles movimientos innecesarios de un hospital a otro, acabar con las largas colas para obtener un turno. La secretaría de Salud del Gobierno de la Ciudad sostiene que, para fines de 2002, todo el sistema de salud esté informatizado y que los 33 hospitales, los 33 centros de salud y los 10 centros médicos barriales que lo conforman trabajarán en red.
Esto permitirá, por ejemplo, realizar un diagnóstico en una institución hospitalaria y pedir turno en otro centro a través de una conexión on line. Si bien las autoridades reconocen que el problema de las demoras para obtener un turno no depende de las computadoras, sino de una ampliación de los horarios de atención, afirman que el nuevo sistema evitará "movimientos innecesarios de los pacientes" y las tristemente famosas colas de espera. Otra ventaja será que, con la identificación de los pacientes en red, se eliminarán los trámites repetidos y la superposición de informes. También se planea implementar un programa identificar a los pacientes sin cobertura médica. Sus datos serán ingresados a la red y se les dará, a cada uno, una tarjeta con su número de documento. Con ésta, la población sin cobertura podrá acceder a la protección.
El software fue diseñado por un equipo de expertos de la dirección de Información de Salud, a cargo de Claudio Andrili. El programa se desarrollará en dos etapas: en una primera fase se pondrán en funcionamiento lo referente a turnos, admisión, egresos y facturación. En un segundo período, que será a partir del 2002, se habilitarán los módulos de compras, laboratorio y diagnóstico por imágenes.
La aplicación del programa comenzará en el Hospital Penna, de Parque de los Patricios.