El fallo del 2×1 de la Corte Suprema de Justicia, que benefició a un represor condenado por crímenes de lesa humanidad, despertó una fuerte polémica, el rechazo por parte de todos los organismos de derechos humanos, quienes decidieron movilizarse en repudio a la decisión judicial.
Hasta el momento habrá dos protestas, aunque se espera que en las próximas horas se unifiquen en una sola.
El miércoles, una docena de organismos de derechos humanos, entre ellos Abuelas y Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas e H.I.J.O.S. Capital, convocaron a concentrarse a las 18 en Plaza de Mayo bajo la consigna: “Señores jueces: Nunca Más. Ningún genocida suelto. 30 mil detenidos desaparecidos presentes”.
“Esperamos que el conjunto de la sociedad nos acompañe para que nunca más haya impunidad en la Argentina, porque lo que no se juzga y se condena, se repite”, afirmaron los organizadores en un comunicado, firmado también por Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) y APDH-La Matanza, Asociación Buena Memoria, Comisión Memoria, Verdad y Justicia Zona Norte, Familiares y Compañeros de los 12 de la Santa Cruz, Fundación Memoria Histórica y Social Argentina, Liga Argentina por los Derechos del Hombre y Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH).
Inicialmente, estas organizaciones habían convocado a un acto frente a Tribunales, pero “debido a los arreglos en Plaza Lavalle” dispusieron el cambio del lugar de convocatoria, según aclararon en un nuevo comunicado difundido este mediodía.
Sin embargo, la convocatoria frente a Casa de Gobierno servirá también para cuestionarle al Gobierno la decisión de la Corte, pese a que desde Cambiemos insisten en despegarse del fallo a favor de un represor, apelando a la independencia de poderes.
Por su parte, los organismos de derechos humanos nucleados en el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia convocaron para el jueves próximo a las 17, a una marcha desde el Congreso a Plaza de Mayo, para que “todo el país convierta ese día en una jornada nacional contra la impunidad y la represión”, expresaron a través de un comunicado.
“Para los genocidas que torturaron, secuestraron y desaparecieron a nuestros compañeros, pedimos cárcel común y efectiva desde hace más de 30 años”, dice la declaración que define al fallo del Máximo Tribunal como “una verdadera provocación” y “un verdadero mamarracho fascista, pues la regla de aplicar la norma más benigna resulta absurda, ya que la ley del 2×1 no existía en el momento de cometerse los delitos”, agregaron.
Las organizaciones de derechos humanos cuestionaron unánimemente la decisión de una mayoría del Máximo Tribunal constituida por los ministros Elena Highton, Rosenkrantz y Rosatti. Y advirtieron que esa decisión abre las puertas a que otros condenados por delitos de lesa humanidad que no tengan sentencia firme soliciten la reducción del tiempo de prisión, algo que efectivamente comenzó a suceder desde ayer.
En disidencia, votaron los jueces Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda, quienes argumentaron que ese beneficio -que rigió desde 1994 hasta el 2001- no es aplicable a los delitos de lesa humanidad.