La legisladora porteña Graciela Ocaña, que pertenece al bloque opositor Confianza Pública pero será candidata por Cambiemos en la Provincia de Buenos Aires, convocó a sus seguidores a fortalecer Cambiemos, sugiriendo al mismo tiempo a Martín Lousteau que esto significa “dar un paso al costado”.
“La Hormiguita”, mote que le debe a la lengua ingeniosa de Elisa “Lilita” Carrió, fue convocada a sumarse a las filas del oficialismo, que busca con ella sumar conciencia crítica -una cualidad que por arriba denuncia, pero por abajo promueve- para desarrollar una estrategia de campaña que estará basada en asociar al Gobierno anterior con una actitud de deficiencia ética incompatible con la democacia y la república.
“Yo siempre creo en las competencias, pero también creo que hay que fortalecer Cambiemos y fortalecer Cambiemos, a veces, es dar un paso al costado, tratar de colaborar desde otro lugar“, le sugirió al hombre de la cabellera desordenada. Luego, agregó, preocupada, que “me parece que lo que se juega en este elección es mucho“.
En 2015, Ocaña compitió con Lousteau por la hegemonía en el frente Energía Ciudadana Organizada (ECO), una compulsa de la que salió perdidosa. Aún así, aclaró que sostiene con el exdiplomático “una muy buena relación personal”. Lousteau se encuentra en estos momentos embarcado en solicitarle a la conducción de Cambiemos que se le permita competir en las PASO contra el candidato de Cambiemos en Capital, hasta ahora sin éxito.
Esto último significa que el exembajador competirá en medio del más absoluto desamparo, al contrario que “La Hormiguita”, que será parte del oficialismo, en el que podría encabezar la lista de diputados.
“El presidente me invitó a formar parte de los espacios políticos de Cambiemos a nivel nacional para trabajar estos temas (los temas éticos y republicanos, aparentemente), pero no hablamos ni de distritos ni de candidaturas“, expresó la legisladora opositora, pero con un dejo de oficialismo, poniéndole suspenso a la definición, como Sebastián Driussi en La Bombonera.