Rodríguez Felder, titiritero y filósofo, expresó por algunos medios su indignación por el abrupto corte en sus funciones (que no habían comenzado), como ministro de Cultura de Macri.
El hombre -a quien una fuente del PRO confió a NOTICIAS URBANAS su destitución el pasado miércoles y hoy confirmó que todavía no tiene reemplazante-, aseguró ignorar las luchas intestinas en el partido del empresario, pero no dudó en calificar la división: existen "halcones" y "palomas".
El tópico le sirvió al editor de la casa "Imaginador" para reforzar su teoría de una conspiración (contra su persona), piloteada por los "halcones", que no son las "palomas" que le transmitieron la decisión de expulsarlo.
La tenacidad de Gabriela Michetti, vicejefa electa, en la defensa del ministro que no fue, no pudo contra los argumentos de Horacio Rodríguez Larreta y Cristian Ritondo, entre otros, que sostenían la inviabilidad de sostener en ese cargo a una persona repudiada por toda la intelectualidad porteña, incluso desde medios notoriamente conservadores.
"No hay ningún apuro. Estamos tranquilos", dijo a este cronista el consultado, y no descartó ni confirmó ninguno de los nombres en danza, desde Hernán Lombardi a Pablo Batalla, aunque dijo que podía hacer sorpresas.