El presidente de la Nación, Mauricio Macri, encabezó este lunes un acto de homenaje a los policías federales caídos en cumplimiento del deber, en el barrio porteño de Belgrano. Asimismo, le fueron entregadas medallas y plaquetas a los familiares de los uniformados que perdieron la vida en servicio.
“Cada pérdida es dolorosa, y es un llamado a la paz”, aseguró Macri en el marco del acto, y se comprometió en “batallar contra lo que pareciera ser la naturalización de la muerte de un policía; es un servidor público que tiene un rol fundamental, es el que está cuidándonos”.
El primer mandatario estuvo acompañado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, la cúpula policial y familiares de uniformados, a quienes se le otorgó la Medalla Púrpura. “Decidir ser policía requiere no solo vocación de servicio y valentía; requiere un corazón especial, porque esta convicción de servir incluye un riesgo porque además decidimos trabajar juntos para enfrentar al crimen organizado”, sostuvo.
La ceremonia se desenvolvió frente al monumento que recuerda a los efectivos caídos en cumplimiento de sus funciones, ubicado en el cruce de las avenidas Figueroa Alcorta y Monroe, en el barrio de Belgrano.
También estuvieron presentes el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis; el secretario de Seguridad, Eugenio Burzado; el titular de la Cámara de Diputados de la Nación, Emilio Monzó; el jefe de la Policía Federal, Néstor Roncaglia; la subjefa de la fuerza, Mabel Franco; el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, y las autoridades de otros cuerpos de seguridad.
“Como ciudadano común siempre pensé que decidir ser policía requiere no sólo vocación de servicio sino también valentía y un corazón especial, porque incluye un riesgo muy grande”, consideró el Jefe de Estado.
Pidió a los familiares que más allá de dolor “traten de quedarse con el recuerdo de lo mejor de cada uno de ellos” porque además de tratarse de un ser querido “eran todas personas muy valiosas y argentinos comprometidos”.
A su turno, Roncaglia, subrayó que “asesinar a un policía o a cualquier trabajador de las fuerzas de seguridad significa franquear la barrera de una Nación”, y añadió que “el ser querido que han perdido no será olvidado” y “siempre podrán contar con las autoridades de la Nación y de la Policía Federal”.
Al momento de la entrega de las distinciones, se destacaron los familiares del agente Alan Dolz y del sargento Claudio Olveira. Dolz, de 21 años, fue asesinado el pasado 27 de abril, mientras realizaba una investigación encubierta de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal, en Villa Loyola. En tanto que Olveira, prestaba servicio de vigilancia preventiva en el barrio porteño de Villa Pueyrredón y recibió tres balazos que terminaron con su vida, al impedir un robo.
Además recibieron plaquetas familiares de los sargentos (post mortem) Santiago Fernández y Daniel Víctor; sargento primero (post mortem) Lorenzo Benítez, auxiliar 2° de inteligencia Antonio Toscano, y cabo primero Norberto González. También del sargento primero Manuel Enrique Romero; cabo primero Miguel Ángel Carabetta, comisario inspector (post mortem) Daniel Mazzucco y cabos primeros Miguel Ángel Borejko y Juan Manuel Valdez Jer.
Junto al Pte @mauriciomacri rendimos homenaje y acompañamos a las familias de los agentes de la @PFAOficial caídos en cumplimiento del deber pic.twitter.com/6P5p3vNLLd
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) July 3, 2017