Frente a este nuevo escenario legislativo, el legislador del Partido Socialista Auténtico (PSA), Adrián Camps, expresó: “Es hecho gravísimo a nivel institucional, porque el nuevo espacio incluye fuerzas que han llegado a la Legislatura como opositoras. El poder político en la Ciudad se desequilibra, queda en manos de una sola fuerza política y ya no refleja lo que votaron los porteños. La realidad es que el Pro no tiene más del 50% de los votos. A partir de esta nueva conformación, el oficialismo puede sancionar prácticamente cualquier ley, a excepción de las que requieren 40 votos”.
“En la Legislatura se están discutiendo los nuevos códigos urbanísticos y de edificación, que van a modificar todo el perfil de la Ciudad. Con la nueva mayoría, el oficialismo puede diseñarlo a su merced. Si esto sucede, el aumento de la densidad constructiva va a cambiar la calidad de vida de los porteños. En las avenidas perderíamos la luz del sol, la vista del cielo y parte del arbolado. También podría producirse una sobredemanda de servicios, cuando todos los veranos tenemos problemas por los cortes de energía eléctrica” manifestó el legislador socialista.
“Las próximas elecciones adquieren gran importancia. Hay que volver a equilibrar la Legislatura porteña, ya que esta nueva conformación no se corresponde con la realidad de las representaciones políticas en la Ciudad de Buenos Aires”, finalizó.