Finalmente, este viernes se conoció la noticia de que Espinoza bajó su candidatura y que Menéndez será el próximo titular del partido a partir del 19 de diciembre y así el peronismo provincial evitó ir a una interna tras acordar este sector una lista de unidad con el exintendente de La Matanza.
El acuerdo llegó tras una ardua negociación en la que Espinoza finalmente aceptó declinar su candidatura. Como compensación, quedará a cargo del congreso partidario.
El matancero logró ubicar a la intendenta Verónica Magario como representante por la rama femenina, con lo que quedará en la estructura de gobierno partidaria.
La secretaría general, otro de los cargos apetecibles, recaerá en Juan Pablo de Jesús, el intendente de La Costa, cercano al lomense Martín Insaurralde.
La conducción durante el lapso de un año será ejercida por Menéndez, quien encarna al sector de intendentes que pugnan por la “renovación” partidaria. En tanto, durante el segundo año quien se hará cargo de la presidencia será Fernando Gray, el jefe comunal de Esteban Echeverría también cercano a Insaurralde.
Menéndez es de la Primera sección y Gray de la Tercera. Los renovadores buscan poner proa a un peronismo sin la hegemonía kirchnerista, aunque el esquema de acuerdo habría terminado con la cesión de la secretaría de la Juventud para La Cámpora.
Menéndez tiene el apoyo de sectores del peronismo que hace años se alejaron del partido por sus diferencias con el kirchnerismo, como el Frente Renovador, que lidera Sergio Massa, y también dirigentes que integran las filas de Cumplir, espacio que encabeza el exministro Florencio Randazzo.
También Menéndez sumó el respaldo de la mayoría de los intendentes del Conurbano y varios sindicalistas, entre ellos el camionero Hugo Moyano y el gastronómico Luis Barrionuevo.